4/3/12

Demandas

Las 10 demandas más absurdas
1. En 2004, Timothy Dumouchel, de Fond
du Lac, Wisconsin (Estados Unidos),
demandó a una compañía televisiva
por haber hecho engordar a su
esposa y transformar a sus hijos en
“ vagos zapperos“. “Creo que la razón
por la que fumo y bebo a diario y por
la mi mujer sufre sobrepeso es
porque vemos la televisión a diario
desde hace cuatro años.
2. En 2005, una mujer brasileña
demandó a su compañero sentimental
porque no conseguía que ella
llegara al orgasmo. La mujer, de 31
años, aseguró que su pareja, de 38,
terminaba acababa habitualmente las
relaciones sexuales sin que ella
hubiera logrado el orgasmo.
3. En 2007, un padre de Zhengzhou
(China), no pudo llamar a su hijo “@”
porque, según las leyes chinas, todos
los nombres deben poder ser
traducidos al mandarín .
4. En 2005, Pavel M., un preso rumano
condenado a 20 años por asesinato,
demandó a Dios basándose en que,
en su bautizo, firmó un contrato en el
cual Dios se comprometía a
mantenerle alejado de los problemas.
Este año, un senador estadounidense
demandó a Dios por causar
“catástrofes” en el mundo.
5. En 2005, el Tribunal de Apelación de
Massachusetts (Estados Unidos) tuvo
que decidir cuándo es peligrosa una
técnica sexual. Una pareja, que
llevaba varios años de relación,
practicaba el coito cuando ella, de
manera repentina, hizo una brusca
maniobra que le fracturó el pene al
hombre, que la demandó y requirió
cirugía.
6. En 2005, Marina Bai, una astróloga
rusa, demandó a la NASA por
“interrumpir el equilibro del
universo”. Reclamó que la sonda
espacial Deep Impact , que debía
impactar con un cometa a finales de
ese año para recoger el material que
resultara de la explosión con fines
científicos, era un “acto terrorista”.
7. En 2007, un tribunal de la India tuvo
que decidir si un condón vibrador es
un anticonceptivo o un juguete
sexual . Los condones contenían un
dispositivo a pilas. Los denunciantes
alegaron que los juguetes sexuales
son ilegales en la India.
8. En 2006, un joven de Jiaxing, una
región cercana a Shanghai, tuvo
problemas con la ley del país asiático
tras poner su alma a la venta en
internet.
9. En 2004, Frank D’Alessandro, un
funcionario judicial de Nueva York,
demandó a la ciudad por las heridas
que sufrió tras estallar el váter en
el que estaba sentado.
10. En 2001, Cathy McGowan, de 26 años,
ganó un concurso en un programa
de radio por contestar correctamente
a una pregunta. Demandó a la
emisora porque el premio era un
Renault Clio pero, cuando fue a
recogerlo, le entregaron un coche de
juguete.