Mostrando entradas con la etiqueta escultura. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta escultura. Mostrar todas las entradas

28/11/14

El Sátiro Danzante de Mazara

La estatua de bronce fue encontrado en la primavera de 1998 durante un viaje de pesca en el estrecho de Sicilia y es un raro ejemplo de estatuas de bronce griego. Inflexión en el lado derecho, con los brazos estirados hacia adelante, está atrapado en el momento en el que está haciendo un salto en el dedo del pie derecho levantando su pierna izquierda al mismo tiempo. Su pelo, pelo grueso delgado destacó por grabados, se agitan por el pathos de la danza orgiástica, que rompe todas las reglas del equilibrio, dando al cuerpo un movimiento enfático.
Extraordinariamente conservado los ojos, en yeso piedra caliza originalmente integrado con vítreo coloreado pasta. Según la iconografía del Sátiro en éxtasis, conocido ya desde el siglo IV A.C., la estatua debía sostener con su mano derecha el tirso, atributo Dionisio mientras el brazo izquierdo sostenía una piel de Pantera y su mano izquierda un vaso de vino.

14/7/14

LA VIRGEN DEL VELO

La Virgen con velo es una escultura realizada en mármol de Carrara y fue tallada en Roma por el escultor italiano Giovanni Strazza. Representa el busto de una Santísima Virgen María cubriendo su rostro con un delicado velo. La fecha exacta de finalización de la estatua se desconoce.
La estatua fue transportada a Newfoundland en 1856, según lo registrado el 4 de diciembre en el diario del obispo John Thomas Mullock:
"Se ha recibido de forma segura desde Roma, una hermosa estatua de la Santísima Virgen en mármol, de Strazza. La cara está cubierta, y la figura y la forma se aprecian perfectamente. Es una joya de arte perfecta."
La Virgen con velo se mantuvo a continuación, en el Palacio Episcopal junto a la catedral católica de St. John hasta 1862, cuando el obispo Mullock lo presentó a la Madre María Magdalena O'Shaughnessy, el Superior del Convento de la Presentación. El busto desde entonces ha permanecido bajo el cuidado de hermanas de la Presentación, en Plaza de la Catedral, de San Juan.
La Virgen con velo de Strazza es un buen ejemplo del movimiento nacionalista del arte italiano llamado Risorgimento. La imagen de la mujer con velo estaba destinada a simbolizar Italia como Britannia simboliza a Inglaterra, Hibernia simboliza a Irlanda, y la Libertad simboliza a los Estados Unidos. Pietro Rossi y Monti Raffaelle fueron los contemporáneos italianos más importantes de Strazza que también esculpieron mujeres con velo.

1/1/14

"EL EXTASIS DE SANTA TERESA DE JESÚS" DE BERNINI

"Veíale en las manos un dardo de oro
largo, y al fin del hierro me parecía
tener un poco de fuego. Este me
parecía meter por el corazón algunas
veces y que me llegaba a las
entrañas. Al sacarle, me parecía las
llevaba consigo, y me dejaba toda
abrasada en amor grande de Dios.
Era tan grande el dolor, que me
hacía dar aquellos quejidos y tan
excesiva la suavidad que me pone
este grandísimo dolor que no hay
desear que se quite, ni se contenta el
alma con menos que Dios. No es
dolor corporal sino espiritual aunque
no deja de participar el cuerpo algo,
y aún harto. Es un requiebro tan
suave que pasa entre el alma y Dios,
que suplico yo al su bondad lo dé a
gustar a quien pensare que miento"
Con estas palabras describía su
éxtasis místico Santa Teresa de Jesús
en "El libro de la vida" y fueron las
que inspiraron a Gian Lorenzo Bernini
(1598-1680) la escultura "El extasis de
Santa Teresa" (1647-1651), una obra
que actualmente se encuentra en la
Capilla Cornaro de la Iglesia romana
de Santa María de la Victoria. Santa
Teresa, acostumbrada a vivir sin vivir
en ella, describe en sus palabras un
trance que al ser traducido a la
piedra da la sensación de que más
que una experiencia espiritual, es un
goce intenso y sensual, por decirlo
elegantemente. Todas esas
sensaciones parecen agitarse de
forma desbordada, al igual que las
ropas de la Santa que se presentan
como olas de piedra que evocan el
terremoto espiritual al que esta se ve
sometida.

EL APOXIOMENO DE LISIPO

El Apoxiomeno es una famosa
escultura del escultor griego Lisipo,
realizada aproximadamente sobre el
año 325 a.C. y de la que se conserva
una magnifica copia romana en los
Museos Vaticanos. La palabra
"Apoxiomeno" según su origen griego
podría traducirse por "El raspador".
La estatua, realizada en mármol
Pentélico y es algo mayor al tamaño
natural pues mide 2,05 metros. Es el
retrato ideal de un atleta y magnate
de Tesalia que había vivido en el
siglo V a. C., y cuyo nombre era
Agias. Un descendiente suyo, Dáoco,
tetrarca de su país, al realizar en
Farsalia un monumento a sus
antepasados, encargó esta obra, en
bronce, al aún joven artista, y unos
años después, en el 337, hizo
ejecutar copias en mármol para
dedicarlas en Delfos. Para representar
al atleta no escoge precisamente un
momento triunfal, que era lo
habitual, sino que lo plasma en una
acción cotidiana, así, lo podemos ver
rascándose la cara posterior del
antebrazo, para quitar el polvo, el
sudor y el aceite que quedaron en su
cuerpo tras la práctica deportiva,
ayudándose para ello del pequeño
instrumento curvo que los romanos
llamaban estrígil. La bella anatomía
del atleta viene dada por una serie
de influencias que tuvo Lisipo:
Praxiteles, Escopas y Fidias, los
grandes autores clásicos por
excelencia, pero haciendo suyas sus
propuestas logra un planteamiento
nuevo y personal, acorde a sus
propios intereses
La escultura fue descubierta por unos
obreros en 1849, en el barrio romano
del Trastevere, en las ruinas de lo
que se creía entonces que eran las
termas romanas. Al principio se creyó
que era una obra de Policleto, pero
en 1950 el arqueólogo alemán August
Braun, ya la identificaba como una
copia romana de un escultura de
bronce atribuida a Lisipo, cuya
existenica se conocía únicamente por
una mención de Plinio el Viejo en su
Historia Natural: «[Lisipo] realizó, tal
y como he dicho, la mayor parte de
las estatuas, con un arte muy
fecundo, y entre ellas, un atleta
limpiándose con un estrígil
(destringens se)». Para su
identificación se basaba por unaparte
en la postura de la estatua , y por
otra en las observaciones de Plinio
sobre el canon lisipeo, más esbelto
que el de Policleto.
La estatua, que goza de una gran
popularidad desde que se descubrió,
fue restaurada por el escultor italiano
Pietro Tenerani, que completó los
dedos faltantes de la mano derecha,
el comienzo, reconstruyó el estrígil
desaparecido de la mano izquierda y
escondió los genitlaes del atleta tras
una hoja de parra, elementos que si
bien son aún visibles en muchas
fotografías fueron, eliminados con
posterioridad, devolviendo a la
escultura a su estado original.
La estatua impresiona por su
composición, que no es únicamente
frontal, como en el Doríforo o el
Discóbolo. El brazo derecho del atleta
extendido en ángulo recto obliga al
espectador, si quiere captar el
movimiento, a moverse a los lados,
rompiendo así la frontalidad y el
hieratismo, mientras que el brazo
izquierdo se flexiona, en contra del
movimiento de la pierna derecha,
logrando con este ritmo zigzageante
que la obra cobre vida y creando un
movimiento de torsión que el
espectador no puede comprender
plenamente más que reproduciendo e
imitando la postura. Para conseguir
tal fin es también empleado el
contrapposto («contoneado») de la
escultura, así el peso del cuerpo
reposa solo sobre la pierna izquierda,
mientras que la derecha está
ligeramente avanzada y replegada.
Por lo tanto, las caderas están
orientadas hacia la izquierda,
mientras que los hombros se giran en
dirección opuesta, siguiendo el
movimiento del brazo derecho,
La cabeza sorprende por su reducido
tamaño: representa una octava parte
del cuerpo, frente a una séptima en
el canon de Policleto. Otra novedad
es que la cabeza está tratada como
un retrato y en el se ha representado
el cabello desordenado, la frente está
marcada y los ojos hundidos, que
dotan a la obra de gran viveza.
Pero no es el único "Apoxiomeno" ya
que esta era una forma de
representación habitual en la
antigüedad.

VENUS BORGHESE

Una de las obras maestras del gran
escultor Antonio Canova es sin duda
el notable retrato que hizo de Paulina
Bonaparte, la hermana de Napoleón,
conocida como Venus Borghese
(1804-1808). En esta escultura la
modelo se muestra desnuda y al
respecto le preguntaron a Paulina
como había podido posar sin ropas
ante el artista, a lo que esta contestó
con naturalidad y total desenfado:
"Había una buena estufa en el
estudio…"
La escultura se presenta como una
Venus Victoriosa (Venus Victrix). En
realidad Canova sugirió inicialmente
representarla como Diana, la diosa de
la caza, pero fue la propia Paulina la
que insistió en ser mostrada como
Venus, la diosa del amor, algo que
parece justificado dada la fama que
llego a adquirir en Roma. Paulina
tenía 25 años cuando el escultor
empezó el trabajo en un único
bloque de mármol de Carrara. La
diosa se presentó reclinada sobre un
diván, indolente, extendiendo la
pierna derecha sobre la que reposa la
izquierda y sosteniendo la manzana
del juicio de Paris en su mano
izquierda como atributo normal de la
diosa, mientras parece dirigir su
altiva mirada hacia el espectador. No
es como otros retratos alegóricos del
autor, una obra muy idealista, pero
aunque hace referencia al arte
antiguo, muestra un naturalismo
típico del siglo XIX. Debido a la
notoriedad de Paulina, su marido el
príncipe Camillo Borghese, y autor
del encargo, mantuvo la escultura
oculta a los ojos del público, y en
raros casos permitía su visión y
siempre bajo la tenue luz de una
antorcha. De cualquier manera, el
trabajo fue muy bien recibido y se
considera una de las obras maestras
de Canova.
La obra se expone en la Galleria
Borghese de Roma.

30/11/13

EL ROSTRO DE LEONARDO

De todos es conocido ese juego de
imágenes que circula por muchos
sitios en el que se confronta el rostro
de la Gioconda con el autorretrato de
un Leonardo da Vinci ya envejecido.
La caja de sus rostros coincide a la
perfección y deja una enigmática
sombra sobre la idea de que la Mona
Lisa no fuera sino un autorretrato del
propio Leonardo, jugando con su
propio rostro y que fuera ese y no
otro el motivo de esa peculiar
sonrisa. No es una idea descabellada,
que Leonardo, un reconocido
homosexual, quisiera jugar con una
imagen idealizada de si mismo en un
retrato, pero una de las cosas que
nos hace tener reparos en la
comparación, es ese rostro envejecido
de Leonardo.
¿Cómo era de joven este genio?
Leonardo nació en 1452 y pronto se
fue al taller de Verrocchio, un famoso
artista florentino, con el que se
adiestró en el manejo de los pinceles.
Se sabe que en su juventud Leonardo
era muy atractivo tanto por su rostro
como por sus gestos. Y no son pocos
los que dicen que fue tomado como
modelo para el David de bronce que
creo Verrocchio, su maestro, y que
actualmente se puede admirar en el
Museo del Bargello y cuyo rostro
encabeza este texto. Normalmente
uno se fija en la postura y conjunto
de la obra de este magnífico David,
pero cuando se repara en el rostro, el
que posiblemente fuera de ese joven
Leonardo, se descubre una frente
ancha como la de la Mona Lisa, que
con otro peinado realzaría el
parecido, su misma nariz, y
conformación de los ojos, y lo más
curioso la escultura presenta una
extraña sonrisa, tan enigmática y
ambigua como la del famoso cuadro.
Soy consciente de otras diferencias,
pero puestos a meterme en arenas
movedizas y crear un poco de debate
¿Será cierto que la Gioconda no es
sino el retrato idealizado de un
Leonardo da Vinci que nunca quiso
separarse de él, de ella, de sí
mismo ???
En cualquier caso, y más alla de la
posiblemente alocada comparación
propuesta, creo al menos es
interesante enfrentarse al rostro que
posiblemente tuvo Leonardo de joven.

13/10/13

ACIS Y GALATEA

Hija de Nereo y Doris, Galatea (blanca
como la leche en griego antiguo) era
una nereida de Sicilia amada por el
cíclope Polifemo. Galatea rechazó al
cíclope al enamorarse de Acis, un
joven pastor siciliano que con
frecuencia era considerado hijo de
Dioniso o, según otras fuentes, de
Pan y la náyade Simetis. El caso es
que Polifemo no se dio por vencido y
cuando, celoso, sorprendió a la
pareja, mató a Acis arrojándole una
roca. Desesperada por el dolor,
Galatea transformó la sangre de su
amado en el río Acis (en Sicilia)
aunque según otras fuentes escriben
que Acis se transformó a sí mismo en
río para evitar ser aplastado. Según
el historiador Apiano, Galatea terminó
siendo madre con Polifemo de Celto,
Ilirio y Gala, dioses epónimos de los
celtas, los ilirios y los gálatas,
respectivamente (así son las cosas
del querer, incluso en la mitología)
Esta preciosa escultura "Polifemo
sorprendiendo a Acis y Galatea" que
podemos ver en la foto haciendose
eco del suceso, es obra del escultor
Auguste Ottin y se encuentra en la
fuente Medici dentro de los Jardines
de Luxemburgo en París y fue
construida en 1630 por María de
Médicis, viuda del rey Enrique IV de
Francia y regente del rey Luis XIII de
Francia. La escultura, se añadió a la
fuente en 1866.

LA VICTORIA DE SAMOTRACIA

Es del s. II y su autor no se conoce.
Su antecedente es la victoria de
Paionos de Mende. Es una victoria
que acaba de posarse en la proa de
un barco, de ahí el estudio del
cuerpo y de las telas, habiendo un
gran movimiento en distintas
direcciones. La tela es muy fina y está
pegada al cuerpo,lo cual permite
observar la anatomía perfectamente,
aunque también hay zonas en las
que se arremolina con numerosos
pliegues y líneas en diagonal.
Las ropas agitadas por el viento
configuran el dramatismo tan
característico de la escuela
escultórica rodia, una de las más
barrocas del helenismo.
Tiene una altura de 245 cm y se
elaboró en mármol hacia el 190 a. C.
Procede del santuario de los Cabiros
en Samotracia. Algunos expertos la
atribuyen con cierta probabilidad a
Pithókritos de Rodas. Fue descubierta
en 1863 en la isla de Samotracia
(Samothraki, en griego) por el cónsul
francés Charles Champoiseau, un
arqueólogo aficionado.
Marinetti, en el manifiesto futurista
publicado en Le Figaro en 1909,
utilizó esta obra para condensar su
ataque a la estatuaria y, por
extensión, al arte tradicional de tipo
clasicista, en beneficio de un nuevo
arte que rindiese culto a los
progresos técnicos de la
industrialización, connotados por la
velocidad y las máquinas. Así, puede
leerse que «un automóvil de carreras
es más hermoso que la Victoria de
Samotracia».
Hay que precisar que una de sus alas,
al menos en parte, no es original sino
producto de una restauración.
Se encuentra en el museo del Louvre.

16/9/13

LA MUERTE EN SAMARRA

El criado llega aterrorizado a casa de
su amo.
- "Señor", dice, "he visto a la Muerte
en el mercado y me ha hecho una
señal de amenaza".
El amo le da un caballo y dinero, y le
dice:
- "Huye a Samarra".
El criado huye. Esa tarde, temprano,
el señor se encuentra la Muerte en el
mercado.
- "Esta mañana le hiciste a mi criado
una señal de amenaza", dice.
- "No era de amenaza", responde la
Muerte, "sino de sorpresa. Porque lo
veía ahí, tan lejos de Samarra, y esta
misma tarde tengo que recogerlo
allá."
Este cuento presente desde antiguo
muy variadas versiones, resultando
esta la adaptación que Gabriel García
Márquez recoge en su libro Gabriel
García Márquez, "Cómo se cuenta un
cuento"
Mención especial merece la escultura
que encabeza el cuento. Es una obra
atribuida al escultor Jaume Serra,
pero que muy posiblemente sea obra
de uno de los miembros de su taller,
llamado Joan Fontbernat Paituví. La
escultura se llama "El beso de la
muerte" y se encuentra en el
Cementerio de Poblenou (Barcelona).
La obra representa un esqueleto
alado, la muerte, que en una actitud
casi erótica besa la sien de un joven
que se desploma. Hacia 1930 la
familia Llaudet perdió un hijo en
plena juventud y quiso hacer una
escultura para su tumba, que
representase los siguientes versos de
Mossèn Cinto Verdaguer que figuran
en su epitafio y que a continuación
cito:
Mes son cor jovenívol no pot més;
en ses venes la sanch s’atura y glaça
y l’esma perduda amb la fe s’abraça
sentint-se caure de la mort al bes.
(Mas su joven corazón no puede más;
en sus venas la sangre se detiene y
se hiela
y el ánimo perdido con la fe se
abraza
sintiendose caer al beso de la
muerte )

11/9/13

EROS Y PSIQUE

Según la historia, inmortalizada por
Apuleyo en su Metamorfosis (El asno
de oro), Psique era la menor y más
hermosa de tres hermanas, hijas de
un rey de Anatolia. Afrodita, celosa
de su belleza, envió a su hijo Eros
(Cupido) para que le lanzara una
flecha de oro oxidado, que la haría
enamorarse del hombre más
horrible y ruin que encontrase. Sin
embargo, Eros se enamoró de ella y
lanzó la flecha al mar; cuando
Psique se durmió, se la llevó
volando hasta su palacio.
Para evitar la ira de su madre, una
vez que tiene a Psique en su
palacio, Eros se presenta siempre de
noche, en la oscuridad, y prohíbe a
Psique cualquier indagación sobre
su identidad. Cada noche, en la
oscuridad, se amaban. Una noche,
Psique le contó a su amado que
echaba de menos a sus hermanas y
quería verlas. Eros aceptó, pero
también le advirtió que sus
hermanas querrían acabar con su
dicha. A la mañana siguiente, Psique
estuvo con sus hermanas, que le
preguntaron, envidiosas, quién era
su maravilloso marido. Psique,
incapaz de explicarles cómo era su
marido, puesto que no le había
visto, titubeó y les contó que era un
joven que estaba de caza, pero
acabó confesando la verdad: que
realmente no sabía quién era. Así,
las hermanas de Psique la
convencieron para que en mitad de
la noche encendiera una lámpara y
observara a su amado, asegurándole
que sólo un monstruo querría
ocultar su verdadera apariencia.
Psique les hace caso y enciende una
lámpara para ver a su marido. Una
gota de aceite hirviendo (de la que
Apuleyo hace un tópico medieval:
stilla olei ardentis) cae sobre la cara
de Eros dormido, que despierta y
abandona, decepcionado, a su
amante.
Cuando Psique se da cuenta de lo
que ha hecho, ruega a Afrodita que
le devuelva el amor de Eros, pero la
diosa, rencorosa, le ordena realizar
cuatro tareas, casi imposibles para
un mortal, antes de recuperar a su
amante divino. Como cuarto
trabajo, Afrodita afirmó que el
estrés de cuidar a su hijo,
deprimido y enfermo como
resultado de la infidelidad de
Psique, había provocado que
perdiese parte de su belleza. Psique
tenía que ir al Hades y pedir a
Perséfone, la reina del inframundo,
un poco de su belleza que Psique
guardaría en una caja negra que
Afrodita le dio. Psique fue a una
torre, decidiendo que el camino más
corto al inframundo sería la muerte.
Una voz la detuvo en el último
momento y le indicó una ruta que le
permitiría entrar y regresar aún con
vida, además de decirle cómo pasar
al perro Cerbero, Caronte y los
otros peligros de dicha ruta. Psique
apaciguó a Cerbero con un pastel de
cebada y pagó a Caronte un óbolo
para que le llevase al Hades. En el
camino, vio manos que salían del
agua. Una voz le dijo que les tirase
un pastel de cebada, pero ella
rehusó. Una vez allí, Perséfone dijo
que estaría encantada de hacerle el
favor a Afrodita. Una vez más pagó
a Caronte y le dio el otro pastel a
Cerbero para volver.
Psique abandonó el inframundo y
decidió abrir la caja y tomar un
poco de la belleza para sí misma,
pensando que si hacía esto, Eros le
amaría con toda seguridad. Dentro
estaba un «sueño estigio» que la
sorprendió. Eros, que la había
perdonado, voló hasta su cuerpo y
limpió el sueño de sus ojos,
suplicando entonces a Zeus y
Afrodita su permiso para casarse
con Psique. Éstos accedieron y Zeus
hizo inmortal a Psique. Afrodita
bailó en la boda de Eros y Psique, y
el hijo que éstos tuvieron se llamó
Placer o (en la mitología romana)
Voluptas.
Imagen: Antonio Canova.- Eros y
Psique

4/5/13

Dirce

Dirce era una ninfa de la mitología
griega, esposa de Lico y sacerdotisa
del dios Dioniso. No existe acuerdo
sobre quien era su padre, asi que
según la fuente es hija de los dioses-
río Aqueloo, Ismeno o Asopo, o de
los dioses Apolo o Helios.
Estando casada con Lico, usurpador
del trono de Tebas, hizo la vida
imposible a la sobrina de su marido,
Antíope, que vivía con ellos desde
que fue repudiada por su esposo, y
a la que trataba como una esclava
por envidia a su belleza y los
rumores que afirmaban que Lico
estaba enamorado de ella. La acusó
de haberse acostado con su marido,
y disfrutaba dándole salvajes tirones
de sus trenzas y arañando su cara.
Su odio visceral la llevó a encerrar
a la desafortunada a oscuras,
privándole incluso de agua para
beber. Pero Antíope logró escaparse
y huyó hasta el monte Citerón,
donde vivían sus hijos Anfión y
Zeto. Éstos, para vengar a su
madre, atacaron Tebas, destronaron
a Lico y ataron a Dirce a un toro
que la arrastró hasta matarla.
Después arrojaron su cuerpo a un
manantial que, desde entonces, lleva
el nombre de la malograda ninfa,
bien porque fue allí donde la
arrojaron sus verdugos o bien
porque el mismo manantial brotó
del cuerpo de Dirce a instancias de
Dioniso.

DIRCE
LORENZO BARTOLINI (1777-1850) -
Italia
Mármol - Museo del Louvre

8/3/13

APOLO Y DAFNE - GIAN LORENZO BERNINI

Entre las mejores esculturas del
barroco hay que dar un lugar de
honor a esta marvillosa obra
llamada "Apolo y Dafne", una
escultura realizada en marmol y a
tamaño natural por el sensacional
escultor italiano Gian Lorenzo
Bernini entre los años 1622 y 1625
y que actualmente se expone en la
Galeria Borghese de Roma.
La escultura se basa en el mito que
cuenta como Apolo, muy hábil con
el arco, quiso competir con Eros en
el arte de lanzar flechas. Eros,
molesto por la arrogancia de Apolo,
ideó vengarse de él y para ello le
arrojó una flecha de oro, que
causaba un amor inmediato a quien
hiriere y paralelamente hirió a la
ninfa Dafne con una flecha de
plomo que por contra causaba el
rechazo amoroso. De esta manera
cuando Apolo vio un día a Dafne se
sintió herido de amor y se lanzó en
su persecución, pero Dafne, que
sufría el efecto contrario, huyó de
él con todas sus fuerzas y corrió
hasta quedar agotada, momento en
el que pidió ayuda a su padre, el río
Peneo, el cual determinó convertir a
Dafne en laurel. Cuando Apolo
alcanzó a Dafne, ésta iniciaba la
transformación: su cuerpo se cubrió
de dura corteza, sus pies fueron
raíces que se hincaban en el suelo y
su cabello se llenó de hojas. Apolo
se abrazó al árbol y se echó a llorar.
Y dijo: «Puesto que no puedes ser
mi mujer, serás mi árbol predilecto
y tus hojas, siempre verdes,
coronarán las cabezas de las gentes
en señal de victoria», resultando
este el origen de las coronas de
laurel.
Gian Lorenzo Bernini (1598-1680)
posiblemente el mejor escultor del
barroco, captura la transformación
de Dafne con intensa emoción,
retratando las diferentes etapas de
sus cambios. Al igual que sucede en
otra de sus sensacionales obras, el
Rapto de Proserpina, la obra nos
pide una visión global y que la
rodeemos para ver todos sus
ángulos ya que vista desde la
espalda de Apolo, la figura de Dafne
queda oculta, mostrándonos sólo el
árbol en que quedará transformada,
pero si buscamos la parte frontal de
la estatua tendremos la visión de la
ninfa en pleno proceso de
metamorfosis. Bernini nos deja esas
marvillosas manos convirtiendose
en ramas pobladas de unas
delicadisímas hojas de marmol
completamente imposibles a
nuestros ojos, o su piel haciendose
corteza, o la maravilla de su pelo
agitado por la carrera. La figura de
Apolo tiene ecos del Apolo
Belvedere de Leocares, mostrandose
como un muchacho andrógino,
joven y delgado, adornado con un
peinado casi femenino, tal y como
era concebido en el perido
helenistico en el que busca
inspiración el escultor. Apolo en la
mitologia predicaba la moderación y
la sobriedad, pero aqui Bernini lo
muestra decidido y anhelante,
persiguiendo desesperadamente el
amor de una Dafne que en último
instante escapa a sus deseos. La
composición se encuentra llena de
dinamismo y el grito de horror que
escapa de Dafne y el rostro perplejo
de Apolo muestran el interes del
escultor por plasmar el memento
con el mayor realismo posible. Y
vaya si lo consiguió!!!
El texto es una adaptación personal
de la reseña de Wikipedia

LEDA Y EL CISNE

En la mitología griega Leda, era hija
de Testio y esposa de Tindáreo de
Esparta, una de las doncellas
seducidas por Zeus. Cuando
caminaba junto al río Eurotas, se le
presentó Zeus transformado en
cisne y fingiendo ser perseguido por
un águila, la violó. Esa misma noche
yació con Tindáreo. Como
consecuencia, puso dos huevos de
los cuales nacieron cuatro hijos:
Helena de Troya, Pólux (inmortales,
presumidos hijos de Zeus) y
Clitemnestra y Cástor (mortales,
supuestos hijos de Tindáreo). Sin
embargo, se considera a Pólux y a
Castor gemelos, conocidos como los
Dioscuros. Leda luego es divinizada
por Némesis, la diosa del castigo
justo. En las versiones más antiguas,
Leda simplemente encuentra un
huevo en donde está el germen de
Helena, hija de Zeus y Némesis. En
ese relato, Némesis trata de escapar
de Zeus mediante la metamorfosis,
convirtiéndose en distintos animales
para poder escapar del dios. Pero
Zeus hace exactamente lo mismo y
compensando cada cambio con el
suyo propio, hasta que finalmente
ella se convierte en una oca y él la
viola en forma de cisne. Pone luego
el huevo en un pantano en donde lo
encuentra Leda. En otras versiones,
Zeus transformado en cisne y
fingiendo estar en peligro, se refugia
en el seno de Némesis y luego la
viola. Hermes pone el huevo en los
muslos de Leda para que sea ella
quien lo "alumbre".
La leyenda de Leda y el Cisne ha
dado en la Historia del Arte
numerosas obras: desde Dalí, en su
cuadro Leda atómica, a Tintoretto,
pasando por Matisse o Paul
Cézanne, o el mismo Leonardo da
Vinci, muchísimos autores han
retratado esta escena.
También hay referencias a Leda en
poemas de Rubén Darío:
1. Blasón: «Es el cisne, de estirpe
sagrada, cuyo beso, por campos de
seda, ascendió hasta la cima rosada
de las dulces colinas de Leda». 2. "
El cisne en la sombra parece de
nieve": << (...)Tal es, cuando
esponja las plumas de seda,
olímpico pájaro herido de amor, y
viola en las linfas sonoras a Leda,
buscando su pico los labios en flor.
(...)>>
Otra referencia a Leda viene
ofrecida en el extenso poema que
da también título al cuarto
poemario publicado por el novelista
y ensayista Aldous Huxley en 1920:
Leda, Chatto & Windus, Londres.
Véase también la traducción al
español del poemario en: Gómez
López, J. Isaías (Editor y traductor),
Aldous Huxley: Poesía completa
(edición bilingüe), Editorial
Universidad de Almería, Almería,
2008, pp. 170-227.
En la novela "El rapto del cisne", de
Elizabeth Kostova (Umbriel Editores,
2010), la trama gira entorno al
cuadro "Leda", del pintor Gilbert
Thomas. En realidad, el cuadro que
ilustra la portada del libro es
"Leda", de François-Edouard Picot.
Inspirado en el mito, Charly Garcia,
compositor del duo argentino Sui
Generis, escribe la cancion Un
Hada, un Cisne.
(De Wikipedia)
Imagen: Auguste Clesinger

30/5/12

INERTIA

Uno de los más curiosos desarrollos
del arte del siglo XXI, probablemente
sean las esculturas submarinas de
Jason deCaires Taylor. Las ideas de
este escultor inglés son descendientes
de escultores tales como Christo,
Richard Long y Claes Oldenburg, que
influyeron en su percepción del arte.
Todos ellos se especializan, en efecto,
en esculturas o representaciones que
jueguen con el espacio abierto, la
naturaleza y el medio ambiente como
parte integral de la obra. De esta
manera, Jason deCaires Taylor decidió
realizar sus esculturas submarinas,
como una proyección de dicha obra.
Como el propio artista expresó a la
revista National Geographic (edición en
español de enero de 2012): "¿Por qué
las he creado? Para mostrar cómo
puede lucir una relación simbiótica y
sustentable con la naturaleza".
Las esculturas de Jason deCaires Taylor
son creadas en cemento marino con
pH neutro, para que no resulte dañino
para el coral. El trabajo tiene mucho
de operación logística: parte con el
bosquejo de la obra y de la mejor
manera de construir, y luego viene el
proceso de transporte e instalación de
la obra en su locación submarina final.
El propio escultor practica buceo, lo
que por supuesto fue el primer
puntapié para su idea, y ahora le
permite fotografiar su propia obra
final: "Cuando está en su lugar, unos
seis meses más tarde, la fotografío: es
la parte divertida. Pero también
representa un reto. El agua salada
altera las formas y el clima y la luz son
inconstantes".
Como el cemento de las esculturas no
es agresivo para el coral, y las
esculturas son hundidas en aguas
tropicales, resulta obvio que éste
termina por tomarse por asalto a las
mismas. Parte importante del
simbolismo de la obra radica aquí: en
la simbiosis entre el coral y el cemento,
entre la naturaleza y lo humano. A la
larga, todas las esculturas terminarán
irreconocibles debajo de una capa de
coral. Parte de la gracia es ésa. Salvo
que uno considere, con una visión más
clásica, que el arte debería aspirar a
ser eterno o imperecedero. Como
suele suceder, es una cuestión de
opiniones.
Si alguien quiere bucear para ir a
tomar fotografías submarinas de las
esculturas antes de ser devoradas por
el coral, el lugar en cuestión es el
Cancun's Underwater Museum. Lugar
que puede ser visitado sólo por buzos,
claro está.
Tomado de http://
sigloscuriosos.blogspot.com.es/2012_02_01_archive.html

27/5/12

GUSTAV VIGELAND Y EL PARQUE DE FROGNER

Adolf Gustav Vigeland (Mandal,
Sørlandet, Noruega, 11 de abril de
1869 - †Oslo, Noruega, 12 de marzo de
1943) fue un escultor noruego cuya
fama se debe sobre todo al Parque de
Vigeland, un área en el interior del
Frognerparken de Oslo donde están
expuestas doscientas de sus esculturas
y otros trabajos.
Vigeland nace en una pequeña ciudad
del sur de Noruega en el seno de una
familia de artesanos y contables,
donde efectúa sus estudios primarios y
se inicia en la escultura de madera. A
los quince años es enviado a Oslo para
hacer de aprendiz de un escultor
profesional de la madera, pero a los
dos años debe volver a casa para
ayudar a la familia por la muerte
imprevista de su padre.
Volvió a Oslo en 1888, a los diecinueve
años, con la intención de ser escultor.
Gracias a la ayuda moral y financiera
del escultor Brynjulf Bergslien,
comenzó a frecuentar una escuela de
arte y en el año 1889 expone por
primera vez al público una de sus
obras ("Hagar e Ismael").
En 1921 el consistorio de Oslo decide
demolir el viejo edificio donde se
encontraba el estudio del escultor para
construir una biblioteca. Se llegó al
siguiente acuerdo: el consistorio
construiría un nuevo edificio destinado
a estudio y vivienda del escultor, que
debería ser transformado en museo
después de su muerte y, a cambio, el
artista se comprometía a donar a la
ciudad todo su trabajo, esculturas,
diseños, bajorrelieves, incluyendo los
modelos.
Vigeland se trasladó al nuevo estudio
en Kirkeveien en 1924, a poca distancia
del Parque Frogner, que había sido
elegido para la instalación definitiva de
la fuente. En los sucesivos veinte años
Vigeland se dedicó al proyecto,
realización e instalación del área
destinada a la exposición permanente
de sus esculturas, que posteriormente
tomó el nombre de Parque de
Vigeland.
En la casa de Kirkeveien vivió y trabajó
hasta su muerte, en 1943. Allí reposan
sus cenizas, conservadas en la torre.
Como estaba previsto, el edificio fue
transformado en el Museo Vigeland,
donde hay expuestas varias obras del
artista y todos los modelos originales
de las esculturas del Parque de
Vigeland.

De 1891 a 1896, Vigeland, hace
diversos viajes al extranjero. Va a
Copenague, París, a Berlín y a
Florencia. De aquella experiencia
procede su formación no académica:
en París frecuenta el estudio de
Auguste Rodin, mientras que en Italia
entró en contacto con el arte antiguo y
con el del Renacimiento. En aquellos
años comenzó a emerger en su obra
algunos de los temas que dominaron
el tiempo de su mayor producción
artística: la muerte, la vida cotidiana, el
hombre y la mujer.
Hace sus dos primeras muestras
personales en Noruega en 1894 y en
1896, obteniendo muy buena acogida
por parte de algunos críticos.


Fuente: wikipedia

Dejo un video
del parque
http://www.youtube.com/watch?
v=gvP2Xjz0Nog

23/5/12

EL SEMBRADOR DE ESTRELLAS.

Las fotos pertenecen a una estatua
ubicada en la ciudad de Kaunas, en
Lituania, y guardan un pequeño
secreto.
Durante el día no es un monumento
que llame mucho la atención ni parece
nada del otro mundo, pero por las
noches ofrece un verdadero
espectáculo a los sentidos y a la
imaginación.
Esta estatua data de la época soviética
y fue levantada en homenaje al pintor
impresionista esloveno Iván Grohar
(1867- 1911).
Está inspirada en su pintura al óleo
llamada "Sejalec" (El Sembrador), que a
su vez representaba a una fotografía
tomada en 1906.
Se encuentra muy cerca del Museo de
la Guerra Vytautas (Vytauto Didžiojo
karo muziejus) de la ciudad.
Observen el efecto de la sombra…
Cuando la noche llega, la estatua
justifica su título.
La pintura está considerada como la
más importante y representativa obra
de arte eslovena y se ha convertido en
un icono nacional, tanto es así que la
imagen se encuentra acuñada en las
monedas de cinco céntimos de euro
de aquel país.
Ahora bien, aquí lo verdaderamente
interesante es que el objetivo original
de la estatua no tenía nada que ver
con las estrellas, sino solamente
representar a un símbolo histórico.
Sin embargo, es curioso ver cómo el
arte de la calle puede dar otro sentido
a las cosas y dotarlas de mayor belleza.
El responsable de las estrellas es
Morfai, un auténtico artista urbano que
le ha dado a la estatua un segundo
significado mediante un inteligente
juego de sombras. En el video que
pongo debajo pueden ver un pequeño
brainstorming con las diferentes
pruebas que realizó sobre la sombra
de la estatua, antes de dibujar las
estrellas.
Para ver la pintura, la foto y las
monedas, hagan click en http://
www.sentadofrentealmundo.com/2010/07/
el-sembrador-de-estrellas.html

17/5/12

Christopher Conte - fusionando materiales

Es un diseñador y artista noruego
con una capacidad extraordinaria
para fusionar piezas y materiales
desechados en pos de lograr una
piezas de arte exquisitas. Un estilo
logrado, al parecer, mezclando a
Huxley, H.R Giger, Da Vinci...
Esculturas del futuro, con
elementos antiguos, en armonía
con acero, bronce, fibras de
carbono, resinas y una visión
conceptual totalmente electrizante.
Luego de licenciarse en el Instituto
Pratt (Nueva York), se dedicó a
trabajar durante 16 años como
protesista profesional para
amputados. En el 2008 comenzó sus
dedicación full-time como artista
desarrollando sus esculturas
biomecánicas y, desde ese momento
su talento se expandió por el
mundo.
Acá una mínima muestra de algunas
de las brillantes obras de
Christopher Conte.


Fuente: www.tan-unico.blogspot.com

14/5/12

ORFEO Y EURÍDICE, MITO Y ANÁLISIS

Orfeo, hijo de Apolo, que poseía el don
de la música y de la poesía, estaba
desposado con la Ninfa Eurídice, de la
que estaba profundamente
enamorado.
Un día que ella estaba paseando por
la orilla de un río, se encontró con el
pastor Aristeo. Cautivado por su
belleza, Aristeo se enamoró de ella y la
persiguió por el campo.
Eurídice trató de escapar, pero
mientras corría tropezó con una
serpiente, que la mordió con su letal
veneno. Abatido por su pérdida, Orfeo
decidió viajar a los infiernos (de los
que ningún mortal habría retornado
jamás), para lograr que le fuera
devuelta su esposa.
A Perséfone (Proserpina), reina del
mundo subterráneo, le conmovió
tanto su pena, que accedió a su
petición a cambio de que no mirarse a
Eurídice en el camino de vuelta a la luz.
Pero a medida que se acercaba el final
de su viaje, Orfeo, no pudo evitar mirar
hacia atrás para comprobar que su
amada seguía junto a él. Al mirar se
desvaneció ante su ojos y la perdió
para siempre. Orfeo nunca se recuperó
y vivió con ese sufrimiento el resto de
sus días.
Merece la pena conocer el magnífico
análisis que sobre el mito realizó
Maurice Blanchot:
"Cuando Orfeo desciende hacia
Eurídice, el arte es el poder por el cual
la noche se abre. La noche por la
fuerza del arte, lo acoge, se vuelve la
intimidad acogedora, la unión y el
acuerdo de la primera noche. Pero
Orfeo desciende hacia Eurídice: para
él, Eurídice es el extremo que el arte
puede alcanzar, bajo un nombre que
la disimula y bajo el velo que la cubre,
es el punto profundamente oscuro
hacia el cual parecen tender el arte, el
deseo, la muerte, la noche. Ella es el
instante en que la esencia de la noche
se acerca como la otra noche.
Sin embargo, la obra de Orfeo no
consiste en asegurar el acceso a ese
«punto», descendiendo hacia la
profundidad. Su obra es llevarlo hacia
el día y darle, en el día, forma, figura,
realidad. Orfeo puede todo, salvo
mirar de frente ese «punto», salvo
mirar el centro de la noche en la
noche. Pero Orfeo, en el movimiento
de su migración, olvida la obra que
debe cumplir, y la olvida
necesariamente porque la exigencia
última de su movimiento no es que
haya obra, sino que alguien se
enfrente a ese «punto», capte su
esencia allí donde esa esencia aparece,
donde es esencial y esencialmente
apariencia: en el corazón de la noche.
El mito griego dice: no se puede hacer
obra si se busca la experiencia
desmesurada de la profundidad por sí
misma, experiencia que los griegos
reconocen necesariamente como obra,
experiencia en la que la obra se
somete a la prueba de su desmesura.
La profundidad no se entrega de
frente, sólo se revela disimulándose en
la obra. Respuesta capital, inexorable.
Pero el mito también muestra que el
destino de Orfeo es no someterse a
esta ley última; y de modo evidente, al
volverse hacia Eurídice vuelve a la
sombra; la esencia de la noche, bajo su
mirada, se revela como inesencial. Así
traiciona a la obra, a Eurídice y a la
noche. Pero no volverse a Eurídice, no
sería menos traicionar, ser infiel a la
fuerza sin mesura y sin prudencia de
su movimiento, que no quiere a
Eurídice en su verdad diurna y en su
encanto cotidiano, que la quiere en su
oscuridad nocturna, en su alejamiento,
con su cuerpo cerrado y su rostro
sellado, que quiere verla no cuando es
visible, sino cuando es invisible, y no
como la intimidad de una vida familiar,
sino como la extrañeza de lo que
excluye toda intimidad, no hacerla vivir,
sino tener viva la plenitud de su
muerte. (...)
Es inevitable que Orfeo no respete la
ley que le prohibe «volverse», porque
la violó desde sus primeros pasos
hacia las sombras. Esto nos hace
presentir que en realidad Orfeo no
dejó de estar orientado hacia Eurídice:
la vio invisible, la tocó intacta, en su
ausencia de sombra, en esa presencia
velada que no disimulaba su ausencia,
que era presencia de su ausencia
infinita. Si no la hubiera mirado, no la
hubiese atraído y, sin duda, ella no
está allí, pero él mismo, en esa mirada,
está ausente, no está menos muerto
que ella, no muerto con la tranquila
muerte del mundo que es reposo,
silencio y fin, sino con esa otra muerte
que es muerte sin fin, prueba de
ausencia sin fin.
Al juzgar la empresa de Orfeo, el día
también le reprocha haber dado
pruebas de impaciencia. El error de
Orfeo parece ser entonces el deseo
que lo lleva a ver y poseer a Eurídice:
él, cuyo único destino es cantarle. Sólo
es Orfeo en el canto, sólo puede
relacionarse con Eurídice en el seno
del himno, sólo tiene vida y verdad
después del poema y por él, y Eurídice
representa esta dependencia mágica
que fuera del canto hace de él una
sombra, y que sólo lo libera vivo y
soberano en el espacio de la medida
órfica.
Si, esto es cierto: sólo en el canto Orfeo
tiene poder sobre Eurídice, pero
también en el canto, Eurídice, ya está
perdida, y Orfeo mismo es el Orfeo
disperso que la fuerza del canto
convierte desde ahora en «el
infinitamente muerto». Pierde a
Eurídice porque la desea más allá de
los límites mesurados del canto, y se
pierde a sí mismo, pero este deseo y
Eurídice perdida y Orfeo disperso son
necesarios al canto, como a la obra le
es necesaria la prueba de la inacción
eterna. Orfeo es el culpable de la
impaciencia. Su error es querer agotar
el infinito, poner término a lo
interminable, no sostener
interminablemente el movimiento de su
error."
(Maurice Blanchot, "La mirada de
Orfeo", en El espacio literario)
Imagen: A. Rodin: Orfeo y
Eurídice

2/5/12

MEDUSA, de BERNINI

Medusa era una
de las tres gorgonas, la única mortal.
Esteno, Euríale y Medusa eran hijas de
dos divinidades marinas, Forcis y Ceto.
Su aspecto era terrible: de la cabeza le
crecían serpientes en vez de pelo, el
cuerpo recubierto de escamas de
dragónen su sonrisa lucían un par de
afilados colmillos de jabalí; sus manos
eran de bronce y sus dos pies, alas de
oro, lo que les permitía volar; y, si
miraban directamente a alguien a los
ojos, al momento le dejaban
petrificado.
De las tres gorgonas, la más famosa
era Medusa, la única mortal. Medusa y
sus hermanas vivían el extremo de
Occidente, cerca del reino de los
muertos, y no había mortal ni divinidad
que no las tuviera temor.
En la versión más conocida del mito,
Medusa era originalmente una
hermosa mujer humana. Poseidón se
enamoró de Medusa, y la sedujo (o
violó) en un templo dedicado a Atenea.
Ambos dioses eran rivales desde que
compitieran por el patronazgo de
Atenas y los habitantes de la ciudad
prefiriesen el olivo de Atenea a la
fuente o los caballos de Poseidón. Tras
descubrir la profanación de su templo,
Atenea transformó a Medusa hasta
tener la forma de sus dos hermanas.
Algunas versiones dicen que fue
Afrodita quien, celosa de la cabellera
de Medusa, la cambió por serpientes.
Mientras Medusa estaba embarazada
de Poseidón, fue decapitada por el
héroe Perseo con la ayuda de Atenea y
Hermes. De la sangre que cayó al suelo
o, según las versiones, de su cuello,
brotó su descendencia: el caballo
alado Pegaso y el gigante Crisaor ( el
padre de Gerión, un gigante que
poseía tres cuerpos hasta la cintura y
al que Hércules mataría en La Coruña y
enterraría debajo de la Torre de
Hércules) . Perseo usó la cabeza de
Medusa para rescatar a Andrómeda,
matar a Polidectes y, en algunas
versiones, petrificar al titán Atlas.
Entonces se la ofreció a Atenea, quien
colocó la cabeza de medusa en su
escudo, la égida. Se dice que la sangre
de la Medusa resucitaba a los muertos
y con ella Asclepio resucitó a algunos
héroes. Según cuenta Pausanias en el
libro II de su Descripción de Grecia,
dedicado a Corinto, el mito de Medusa
es una versión novelada de la historia
de una reina quien, después de la
muerte de su padre, habría recogido
ella misma el cetro, gobernando a sus
súbditos cerca del lago Tritonide, en
Libia. Medusa habría muerto de noche
durante una campaña contra Perseo,
un príncipe del Peloponeso.
El busto, posiblemente realizado entre
1638 y 1648, se inspira en la mitología
clásica narrada en la Metamorfosis de
Ovidio. Muestra a la bella Medusa en el
momento de su transformación en
monstruo

1/5/12

Ronit Baranga

Ronit Baranga es una artista israelí
que después de graduarse en
psicología y literatura judía en la
Universidad de Haifa, decidió estudiar
historia del arte en la Universidad de
Tel-Aviv, y poder dedicarse a su
verdadera pasión, la escultura en
cerámica.
Misteriosa e inquietante cada una de
sus obras representa momentos de
su vida, pensamientos o sentimientos
propios, o cosas por las que siente
nostalgia. Otras, representan para ella
momentos humorísticos. Objetos a
través del cual los dedos humanos y
las bocas expresan sus deseos. Sin
embargo, no faltan quienes califican
estás obras de “tétricas” y
“perturbadoras”.
www.ronitbaranga.com