1/1/14

EL APOXIOMENO DE LISIPO

El Apoxiomeno es una famosa
escultura del escultor griego Lisipo,
realizada aproximadamente sobre el
año 325 a.C. y de la que se conserva
una magnifica copia romana en los
Museos Vaticanos. La palabra
"Apoxiomeno" según su origen griego
podría traducirse por "El raspador".
La estatua, realizada en mármol
Pentélico y es algo mayor al tamaño
natural pues mide 2,05 metros. Es el
retrato ideal de un atleta y magnate
de Tesalia que había vivido en el
siglo V a. C., y cuyo nombre era
Agias. Un descendiente suyo, Dáoco,
tetrarca de su país, al realizar en
Farsalia un monumento a sus
antepasados, encargó esta obra, en
bronce, al aún joven artista, y unos
años después, en el 337, hizo
ejecutar copias en mármol para
dedicarlas en Delfos. Para representar
al atleta no escoge precisamente un
momento triunfal, que era lo
habitual, sino que lo plasma en una
acción cotidiana, así, lo podemos ver
rascándose la cara posterior del
antebrazo, para quitar el polvo, el
sudor y el aceite que quedaron en su
cuerpo tras la práctica deportiva,
ayudándose para ello del pequeño
instrumento curvo que los romanos
llamaban estrígil. La bella anatomía
del atleta viene dada por una serie
de influencias que tuvo Lisipo:
Praxiteles, Escopas y Fidias, los
grandes autores clásicos por
excelencia, pero haciendo suyas sus
propuestas logra un planteamiento
nuevo y personal, acorde a sus
propios intereses
La escultura fue descubierta por unos
obreros en 1849, en el barrio romano
del Trastevere, en las ruinas de lo
que se creía entonces que eran las
termas romanas. Al principio se creyó
que era una obra de Policleto, pero
en 1950 el arqueólogo alemán August
Braun, ya la identificaba como una
copia romana de un escultura de
bronce atribuida a Lisipo, cuya
existenica se conocía únicamente por
una mención de Plinio el Viejo en su
Historia Natural: «[Lisipo] realizó, tal
y como he dicho, la mayor parte de
las estatuas, con un arte muy
fecundo, y entre ellas, un atleta
limpiándose con un estrígil
(destringens se)». Para su
identificación se basaba por unaparte
en la postura de la estatua , y por
otra en las observaciones de Plinio
sobre el canon lisipeo, más esbelto
que el de Policleto.
La estatua, que goza de una gran
popularidad desde que se descubrió,
fue restaurada por el escultor italiano
Pietro Tenerani, que completó los
dedos faltantes de la mano derecha,
el comienzo, reconstruyó el estrígil
desaparecido de la mano izquierda y
escondió los genitlaes del atleta tras
una hoja de parra, elementos que si
bien son aún visibles en muchas
fotografías fueron, eliminados con
posterioridad, devolviendo a la
escultura a su estado original.
La estatua impresiona por su
composición, que no es únicamente
frontal, como en el Doríforo o el
Discóbolo. El brazo derecho del atleta
extendido en ángulo recto obliga al
espectador, si quiere captar el
movimiento, a moverse a los lados,
rompiendo así la frontalidad y el
hieratismo, mientras que el brazo
izquierdo se flexiona, en contra del
movimiento de la pierna derecha,
logrando con este ritmo zigzageante
que la obra cobre vida y creando un
movimiento de torsión que el
espectador no puede comprender
plenamente más que reproduciendo e
imitando la postura. Para conseguir
tal fin es también empleado el
contrapposto («contoneado») de la
escultura, así el peso del cuerpo
reposa solo sobre la pierna izquierda,
mientras que la derecha está
ligeramente avanzada y replegada.
Por lo tanto, las caderas están
orientadas hacia la izquierda,
mientras que los hombros se giran en
dirección opuesta, siguiendo el
movimiento del brazo derecho,
La cabeza sorprende por su reducido
tamaño: representa una octava parte
del cuerpo, frente a una séptima en
el canon de Policleto. Otra novedad
es que la cabeza está tratada como
un retrato y en el se ha representado
el cabello desordenado, la frente está
marcada y los ojos hundidos, que
dotan a la obra de gran viveza.
Pero no es el único "Apoxiomeno" ya
que esta era una forma de
representación habitual en la
antigüedad.