14/3/12

Las mil ideas que duermen

Gustavo Adolfo Domínguez Bastida
(Sevilla, 1836 – Madrid, 1870), más
conocido como Gustavo Adolfo
Bécquer, fue un poeta y narrador
español, perteneciente al movimiento
del Romanticismo, aunque escribió en
una etapa literaria perteneciente al
Realismo.
Sus más conocidos trabajos son sus
Rimas y Leyendas. Los poemas e
historias incluidos en esta colección
son esenciales para el estudio de la
Literatura hispana.
Bécquer es, a la vez, el poeta que
inaugura —junto a Rosalía de Castro—
la lírica moderna española y el que
acierta a conectarnos de nuevo con la
poesía tradicional. Las Rimas se
encuadran dentro de dos corrientes
heredadas del Romanticismo: la
revalorización de la poesía popular
(que la lírica culta había abandonado
en el siglo XVIII) y la llamada «estética
del sentimiento». El ideal poético de
Bécquer es el desarrollar una lírica
intimista, expresada con sinceridad,
sencillez de forma y facilidad de estilo.
Bécquer y sus Rimas son el umbral de
la lírica en español del siglo XX.
Su idea de la lírica la expuso en la
reseña que hizo del libro de su amigo
Augusto Ferrán La soledad:
“Hay una poesía magnífica y sonora;
una poesía hija de la meditación y el
arte, que se engalana con todas las
pompas de la lengua que se mueve
con una cadenciosa majestad, habla a
la imaginación, completa sus cuadros y
la conduce a su antojo por un sendero
desconocido, seduciéndola con su
armonía y su hermosura. Hay otra,
natural, breve, seca, que brota del
alma como una chispa eléctrica, que
hiere el sentimiento con una palabra y
huye; y desnuda de artificio,
desembarazada dentro de una forma
libre, despierta, con una que las toca,
las mil ideas que duermen en el
océano sin fondo de la fantasía. La
primera tiene un valor dado: es la
poesía de todo el mundo. La segunda
carece de medida absoluta; adquiere
las proporciones de la imaginación que
impresiona: puede llamarse la poesía
de los poetas. La primera es una
melodía que nace, se desarrolla, acaba
y se desvanece. La segunda es un
acorde que se arranca de un arpa, y se
quedan las cuerdas vibrando con un
zumbido armonioso. Cuando se
concluye aquélla, se dobla la hoja con
una suave sonrisa de satisfacción.
Cuando se acaba ésta, se inclina la
frente cargada de pensamientos sin
nombre. La una es el fruto divino de la
unión del arte y de la fantasía. La otra
es la centella inflamada que brota al
choque del sentimiento y la pasión. Las
poesías de este libro pertenecen al
último de los dos géneros, porque son
populares, y la poesía popular es la
síntesis de la poesía”
Publicación de: Alma libre