2/3/12

AMONDAWAS. Gente sin tiempo?

Un estudio, publicado recientemente
por la revista “Language and
Cognition” reveló el reciente hallazgo
de una tribu amazónica que no tiene
un concepto abstracto del tiempo. Se
trata de la tribu Amondawa, la que
según los expertos, carece de las
estructuras lingüísticas que relacionan
el tiempo y el espacio. Los amondawas
reconocen eventos que ocurren en el
tiempo, pero éste no existe como un
concepto aparte. El lenguaje de los
amondawas no tiene una palabra para
designar el "tiempo" o para designar
periodos temporales como “semana”,
"mes" o "año". Así, en sus
conversaciones, nunca se refieren a
sus edades, sino que van asumiendo y
mudando nombres a lo largo de sus
vidas. A cada nuevo nombre
corresponde una etapa de logro o
éxito o también conforme a la mejora
de su estatus dentro de su comunidad.
Una circunstancia afortunada tiene su
propio nombre. Los infortunios son
etapas preteridas que no vale la pena
recordar.
Los Amondawa, refiere la BBC, fueron
contactados por primera vez por el
mundo exterior en 1986, y ahora
investigadores de la Universidad de
Portsmouth, en el Reino Unido, y la
Universidad Federal de Rondonia, en
Brasil, empezaron a analizar la idea del
tiempo en su lenguaje.
El tema es sumamente reflexivo y
provocador en tanto “tiempo” y
“espacio” son las coordenadas de la
historia. Hay quienes viven atados al
lastre de su pasado y sumergidos en el
hueco de su ayer como cangrejos de
playa. Y no se atreven a mirar el
presente ni el futuro. El tiempo fluye
en un incontenible devenir como
contemplaba Heráclito. Otra es la
distinción formulada por Bergson
(1859-1941) que distingue entre la
duración del mundo de los cuerpos y
el irreversible tiempo psicológico en la
vida interior y espiritual de cada
persona.
Para estas personas, como señala
David Metcalfe en el excelente blog
Modern Mythology, es imposible
expresar un conecpto como el
Apocalipsis o el Progreso: “No puede
haber rectificación del tiempo y el
espacio, espíritu y la materia, la
eternidad y la finitud, cuando las dos
no están separadas desde el
principio”.
Metcalfe añade:
“Necesitamos un asesino del tiempo,
una culminación, una historia que
explique cómo regresamos al olvido
del tiempo, esa pequeña palabra que
nos conduce. En todo nuestro
movimiento, sin embargo, existe la
subrepticia sospecha de que en
realidad quizás estemos inmóviles. Lo
que los Amondawa nos enseñan es
que es mucho más fácil que todo esto.
No se necesitan complejas acrobacias
metafíscas, es tan simple como olvidar
una palabra”.
Recurriendo a Wittgenstein y a su
famosa frase sobre que “los límites de
mi lenguaje son los límites de mi
mundo”, ¿si no existe el tiempo en el
lenguaje entonces dejamos de vivir en
el tiempo?
Parece absurdo, no?
Fuentes: http://
palabravertical.blogspot.com/2011/05/
amondawas.html
http://
palosalviento.blogspot.com/2011/05/
en-busca-del-tiempo-perdido.html
http://www.warianoz.com/foros/tribu-
del-amazonas-no-tiene-concepto-
tiempo-1582002/