17/5/12

MORENOS PERO RUBIOS.

Entre los melanesios, los nativos de las
islas Salomón, en el Pacífico sur, es
común tener un aspecto sorprendente.
La piel de todos ellos es oscura, la más
oscura de un ser humano fuera de
África, pero muchos nacen con un
rubio brillante propio de un
escandinavo. Los isleños con cabello
claro alcanzan el 10% de la población,
la mayor prevalencia fuera de Europa.
Hasta ahora se desconocía qué
provocaba esta peculiar apariencia.
Muchos consideraban que se trataba
de un rasgo transmitido por los
exploradores y comerciantes europeos
que visitaron las islas en los siglos
precedentes, pero una nueva
investigación publicada en la revista
Science ha conseguido desentrañar el
misterio. Se trata de una variante
genética única que afecta a este grupo
humano en concreto y que no tiene
nada que ver con el gen que causa los
cabellos rubios en los europeos.
A nivel mundial, el pelo rubio es poco
frecuente. Solo es habitual encontrarlo
en el norte de Europa y, fuera del
continente, en Oceanía, lo que incluye
las Salomón y las islas vecinas. Allí,
entre un 5 y un 10% de la población es
rubia, la misma frecuencia que, por
ejemplo, caracteriza a la población en
Irlanda. Semejante mezcla se creía
fruto del mestizaje. Los mismos
melanesios, más originales, explican el
color platino o dorado de su pelo por
una exposición prolongada al Sol o
una dieta rica en pescado.
Interesados por los hermosos
patrones discordantes de la
pigmentación de los isleños, los
científicos del Centro de Análisis Causal
en Epidemiología Traslacional, de la
Universidad de Bristol (Reino Unido) y
de la Escuela de Medicina de la
Universidad de Stanford (EE.UU.)
tomaron muestras de un grupo de
nativos de Melanesia, 43 con el pelo
rubio y 42 con el pelo oscuro, y llevó a
cabo un análisis genético para
comparar sus genomas. No fue fácil
tomar las muestras: gran parte de las
islas Salomón está poco desarrollada,
sin carreteras, electricidad ni teléfonos.
Además, es una de las naciones con
mayor diversidad lingüística del
mundo, se hablan decenas de lenguas.
Se pidió a los nativos que escupieran
en pequeños tubos para proporcionar
la saliva que se utilizaría para la
extracción de ADN. A pesar de los
problemas, en el lapso de un mes se
recogieron más de 1.000 muestras.
Los investigadores quedaron
fascinados por la ubicuidad del pelo
rubio, especialmente entre los niños.
Cuando analizaron las muestras,
descubrieron de inmediato una única
señal muy fuerte en el cromosoma 9,
que representa el 50% de la variación
en el color del pelo de los melanesios.
El equipo llegó a identificar el gen
responsable, llamado TYRP1, que
codifica una proteína relacionada con
tirosinasa, una enzima previamente
reconocida por influir en la
pigmentación en ratones y seres
humanos. Otros estudios revelaron
que la variante particular responsable
del pelo rubio en las islas Salomón
está ausente en el genoma de los
europeos.
Esto significa que la característica
humana del pelo rubio se originó de
forma independiente en la región
ecuatorial de Oceanía, algo que los
científicos consideran «inesperado y
fascinante».
Extraído de www.abc.es