17/2/13

Catacumbas en Palermo

Es escalofriante imaginar que en las
catacumbas de los Capuchinos en
Palermo, Italia, se puedan apreciar -
como si se tratara de un museo-,
los cuerpos muy bien conservados o
momificados de todos aquellos que
fueron sepultados ahí.
Impresiona ver el perfecto estado
en que se encuentran los cuerpos
luego de muchos años -incluso
siglos en algunos casos-, ya que las
catacumbas datan del año 1559 y le
han dado una fama sin igual a dicho
convento.
Inicialmente, el descubrimiento
sobre el buen estado en el que se
encontraban los cuerpos a pesar del
tiempo, lo hicieron los mismos
frailes en unos cuarenta cadáveres,
luego de que intentaran trasladarlos
hacia otro recinto en las
catacumbas. Esto, al parecer, se
debía a las condiciones propias del
terreno, así como a las corrientes
de aire que parecían dar la
temperatura y el clima ideal para
esta conservación.
También se supo luego, que los
hermanos del Convento de los
Capuchinos de Palermo habían
desarrollado técnicas especiales
capaces de embalsamar
debidamente a los cuerpos para que
su estado de conservación sea el
más óptimo.
Uno de los cuerpos que más llama
la atención, a la vista de todos los
que visitan las catacumbas, es el de
una niña de dos años que, debido a
todos estos cuidados al momento de
ser embalsamada, hoy parece que
estuviera durmiendo
tranquilamente.
Los cuerpos están totalmente
expuestos en hileras como si se
tratara de un museo y clasificados
en hombres, mujeres, niños,
monjes, vírgenes y profesionales.
Entre estos últimos podemos ver a
soldados, militares y combatientes
que incluso se lucen después de
muertos con sus uniformes.
Algunos consideran esto como un
espectáculo de muy mal gusto, sin
embargo, otros piensan que es una
manera más digna de exponer a las
personas que han pasado a mejor
vida y a quienes se les hace un
reconocimiento aún cuando ya no
estén con nosotros.
Fuente: Escalofrío.