20/9/13

LOS SUEÑOS DURANTE EL TERCER REICH

Entre 1933, cuando los nazis tomaron
el poder en Alemania, y 1938, un año
antes del inicio de la II Guerra
Mundial, la periodista judío-alemana
Charlotte Beradt recopiló centenares
de sueños de la gente más dispar de
Alemania. El resultado quedó
registrado en un libro poco común:
“The Third Reich of Dreams”, un
peculiar ejercicio de historia onírica
publicado en 1966,.
El objetivo de Beradt era demostrar el
“devastador efecto emocional que
estaba produciendo el nazismo sobre
la población alemana”, según explica
Jacobo Siruela en “El mundo bajo los
párpados”, el imprescindible tratado
sobre la historia onírica que acaba de
publicar Atalanta.
Veamos uno de los sueños que
rescata Siruela en su libro:
“Un médico está en su casa, hojeando
un libro de pintura. De pronto,
repara en que las paredes de su
habitación han desaparecido.
Extrañado, se levanta para echar un
vistazo, y descubre estupefacto que
ninguna casa del vecindario conserva
sus paredes. Una voz lejana aúlla
desde un altavoz: “¡De acuerdo con el
decreto del 17 de este mes sobre la
abolición de las paredes!”
Algunos de los testigos –señala el
autor- sueñan incluso que está
prohibido soñar pero aún así siguen
soñando.
El “trabajo de campo” de Beradt no
fue fácil, en tanto un régimen
paranoico sospechaba de cualquier
actividad clandestina, incluyendo los
sueños, algo que escapaba totalmente
a su alcance. El resultado revela la
herida psicológica que el clima social
de la Alemania del Tercer Reich ha
dejado en los soñantes. Aquí no hay
conflictos familiares ni problemas
sexuales o personales, sino más bien
“sueños políticos”, como los
denominó la autora. Los sueños
recopilados por Beradt -apunta
Stephen Parker- “demuestran que el
espíritu del hombre estaba en
guerra”.
La tesis de Beradt, compartida por
Siruela y otros herederos
intelectuales de Jung, sostiene que
los sueños pertenecen por derecho
propio a la memoria histórica de un
período concreto. Según dejó dicho
Hegel: “si reuniéramos los sueños de
un momento histórico determinado
veríamos surgir una exactísima
imagen del espíritu de ese período”.
La autora de “El Tercer Reich de los
Sueños” incluso va un paso más allá,
pues considera que el inconsciente
colectivo es capaz de anticiparse a las
consecuencias de las acciones de los
nazis. Escribe Beradt: “Desde el
principio gente de todas las
procedencias y a pesar del miedo y la
ansiedad fueron capaces, a través del
sueño, de reconocer los objetivos y
los principios del totalitarismo y
prever sus consecuencias, de modo
que sus sueños resultan
retrospectivamente proféticos”. Como
muestra, un botón:
“Un ama de casa ve cómo su cocina
ha sido un agente de la Gestapo que
lo inspecciona todo. De pronto se
detiene frente a su vieja cocina
holandesa, alrededor de la cual se
reúnen cada noche la familia y los
amigos para charlar. El guardia
observa el aparato con un extraño
interés; se acerca y abre la tapa del
horno; entonces la cocina deja de ser
una discreta presencia inanimada y,
para horror de toda la familia,
comienza a repetir obedientemente
todos los chistes y agravios que allí
se han dicho contra el gobierno”.
Fuente:
blogs.lainformacion.com