11/2/13

SESGOS COGNITIVOS. EFECTO FORER.

Un sesgo cognitivo, prejuicio
cognitivo o predisposición cognitiva
son términos usados para describir
alteraciones en la mente humana
que son difíciles de eliminar y que
llevan a una distorsión de la
percepción, una distorsión
cognitiva, a un juicio impreciso o a
una interpretación ilógica.
Se trata de un conjunto de
fenómenos, en general, estudiados
por la psicología cognitiva, todos
con soporte empírico, y no debe ser
confundido con lo que comúnmente
se entiende como "prejuicio". Así,
mientras un prejuicio social (por
ejemplo, cualquier forma de
sexismo) se atribuye a un
apasionamiento subjetivo y
consciente a favor o en contra de
algo sin que existan argumentos
suficientes para sustentar esta
posición, un prejuicio cognitivo es
un fenómeno psicológico
principalmente involuntario que
sesga el procesamiento de la
información (como la tendencia
inconsciente y generalizada a
entender un precio de $99,90 como
inferior a $100, cuando la
diferencia es prácticamente
irrelevante a la hora de pagar).
Se trata de tendencias y
comportamientos inconscientes que
nos condicionan al intentar analizar
la realidad.
Hay muchísimos sesgos, uno de ellos es el efecto Forer.

El efecto Forer (también llamado
falacia de validación personal o el
efecto Barnum, por P. T. Barnum)
es la observación de que los
individuos darán aprobación de alta
precisión a descripciones de su
personalidad que supuestamente
han sido realizadas específicamente
para ellos, pero que en realidad son
generales y suficientemente vagas
como para poder ser aplicadas a un
amplio espectro de gente.
En 1948, el psicólogo Bertram R.
Forer dio a sus estudiantes un test
de personalidad, y luego les dio un
análisis de su personalidad,
supuestamente basado en los
resultados del test. Invitó a cada
uno de ellos a evaluar el análisis en
una escala de 0 (muy pobre) a 5
(excelente) según se aplicara a ellos:
el promedio fue de 4,26. Luego les
reveló que a cada estudiante se le
había provisto del mismo análisis:

“Tienes la necesidad de que otras
personas te aprecien y admiren, y
sin embargo eres crítico contigo
mismo.
Aunque tienes algunas debilidades
en tu personalidad, generalmente
eres capaz de compensarlas.
Tienes una considerable capacidad
sin usar que no has aprovechado.
Disciplinado y controlado hacia
afuera, tiendes a ser preocupado e
inseguro por dentro.
A veces tienes serias dudas sobre si
has obrado bien o tomado las
decisiones correctas. Prefieres una
cierta cantidad de cambios y
variedad y te sientes defraudado
cuando te ves rodeado de
restricciones y limitaciones.
También estás orgulloso de ser un
pensador independiente; y de no
aceptar las afirmaciones de los
otros sin pruebas suficientes. Pero
encuentras poco sabio el ser muy
franco en revelarte a los otros.
A veces eres extrovertido, afable, y
sociable, mientras que otras veces
eres introvertido, precavido y
reservado. Algunas de tus
aspiraciones tienden a ser bastante
irrealistas.”

Estudios posteriores concluyeron
que los sujetos dan una evaluación
más alta si se dan las siguientes
características:
-el sujeto cree que el análisis se
aplica sólo a él.
-el sujeto cree en la autoridad del
evaluador.
-el análisis enumera mayormente
atributos positivos.
El Efecto Forer no es la única falacia
o prejuicio cognitivo que nos
conviene entender. Si todos
estuviéramos al tanto de que
nuestra mente muchas veces
funciona así, una gran cantidad de
charlatanes se quedarían sin
clientes.

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Efecto_Forer
http://es.wikipedia.org/wiki/Lista_de_prejuicios_cognitivos