3/8/14

SOBRE LOS OFICIOS

Incluso para ser mendigo hay que conocer bien el oficio
saber cuál es la esencia de su infortunio
buscar de los callejones el mejor espacio para resguardarse del frío
reconocerse un ser vulnerable; vestir su fragilidad de trapos viejos
ver en la mirada del otro un espejo de sus miserias.
Incluso para amar hay que conocer bien el oficio
saber cuál es la esencia de su infortunio
buscar de los callejones el mejor espacio para resguardarse del frío
reconocerse un ser vulnerable; vestir su fragilidad de trapos viejos
ver en la mirada del otro un espejo de sus miserias.
Incluso para olvidar, perdonar…
hay que conocer el oficio.

Jenny Bernal

Imagen: Joven mendigo. Bartolomé Esteban Murillo, 1650. Óleo sobre lienzo. 137 cm × 115 cm. Museo del Louvre, París, Francia