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8/2/15

Virginia Woolf

Adeline Virginia Woolf (Stephen de soltera); (Londres, 25 de enero de 1882 – Lewes, Sussex, 28 de marzo de 1941) fue una novelista, ensayista, escritora de cartas, editora, feminista y escritora de cuentos británica, considerada como una de las más destacadas figuras del modernismo literario del siglo XX.
Durante su vida, sufrió una enfermedad mental hoy conocida como trastorno bipolar. Después de acabar el manuscrito de una última novela (publicada póstumamente), Entre actos, Woolf padeció una depresión parecida a la que había tenido anteriormente. El estallido de la Segunda Guerra Mundial, la destrucción de su casa de Londres durante el Blitz y la fría acogida que tuvo su biografía sobre su amigo Roger Fry empeoraron su condición hasta que se vio incapaz de trabajar. El 28 de marzo de 1941, Woolf se suicidó. Se puso su abrigo, llenó sus bolsillos con piedras y se lanzó al río Ouse cerca de su casa y se ahogó. Su cuerpo no fue encontrado hasta el 18 de abril. Su esposo enterró sus restos incinerados bajo un árbol en Rodmell, Sussex.

En su última nota a su marido escribió:
"Siento que voy a enloquecer de nuevo. Creo que no podemos pasar otra vez por una de esas épocas terribles. Y no puedo recuperarme esta vez. Comienzo a oír voces, y no puedo concentrarme. Así que hago lo que me parece lo mejor que puedo hacer. Tú me has dado la máxima felicidad posible. Has sido en todos los sentidos todo lo que cualquiera podría ser. Creo que dos personas no pueden ser más felices hasta que vino esta terrible enfermedad. No puedo luchar más. Sé que estoy arruinando tu vida, que sin mí tú podrás trabajar. Lo harás, lo sé. Ya ves que no puedo ni siquiera escribir esto adecuadamente. No puedo leer. Lo que quiero decir es que debo toda la felicidad de mi vida a ti. Has sido totalmente paciente conmigo e increíblemente bueno. Quiero decirlo — todo el mundo lo sabe. Si alguien podía haberme salvado habrías sido tú. Todo lo he perdido excepto la certeza de tu bondad. No puedo seguir arruinando tu vida durante más tiempo. No creo que dos personas pudieran ser más felices que lo que hemos sido tú y yo."

19/12/14

MARGUERITE YOURCENAR

"La amistad es, ante todo certidumbre, y eso es lo que la diferencia del amor".
MARGUERITE YOURCENAR

Marguerite Cleenewerck de Crayencour (Bruselas, Bélgica, 8 de junio de 1903 - Bar Harbor, Mount Desert Island, Maine, Estados Unidos, 17 de diciembre de 1987), conocida como Marguerite Yourcenar (primero pseudónimo y luego de nacionalizarse, nombre oficial), fue una novelista, poetisa, dramaturga y traductora francesa nacionalizada estadounidense en 1947.
La madre de Marguerite,
Fernande de Cartier de Marchienne, que provenía de una familia aristocrática belga, murió a los diez días de su nacimiento por complicaciones en el parto, y la niña fue educada por su padre, Michel-René Cleenewerck de Crayencour, que provenía de una familia aristocrática francesa, en la casa de la abuela paterna, en el norte de Francia, Mont Noir, cerca de la frontera con Bélgica. Yourcenar leía a Racine y a Aristófanes a la edad de ocho años. Su padre le enseñó latín a los 10 y griego clásico a los 12.
A partir de 1919 abandona su apellido real y empieza a firmar como Marguerite Yourcenar, siendo éste un anagrama de Crayencour. Su primera novela, Alexis, fue publicada en 1929. En 1939, para que pudiera escapar de los problemas bélicos, su mejor amiga en ese momento, una traductora norteamericana llamada Grace Frick a la que había conocido en París en 1937, la invita a Estados Unidos, donde dará clases de Literatura comparada en la ciudad de Nueva York.
Yourcenar era bisexual, ella y Frick se harán amantes y seguirán juntas hasta la muerte de ésta en 1979 a consecuencia de un cáncer de mama.
Tradujo al francés Las olas de Virginia Woolf, en 1937, Lo que Maisie sabía de Henry James, en 1947, y obras de Yukio Mishima.
En 1947 obtuvo la nacionalidad norteamericana. En 1951 publica en París su muy documentada novela histórica Mémoires d'Hadrien (en español Memorias de Adriano), en la que estuvo trabajando a lo largo de una década. La novela fue un éxito inmediato y tuvo una gran acogida por parte de la crítica. Su presentación fue el motivo para volver a Francia después de doce años de ausencia.
En Memorias de Adriano, Yourcenar recrea la vida y muerte de una de las figuras más importantes del mundo antiguo, el emperador romano Adriano.
La obra está escrita a modo de larga carta del emperador a su nieto adoptivo y futuro sucesor, Marco Aurelio. Adriano le explica su pasado, describiendo sus triunfos, su amor por Antinoo y su filosofía. Memorias de Adriano fue una novela pionera que ha servido de influencia en la posterior novelística histórica y se ha convertido en una obra maestra moderna.
En 1965 publica su obra "Opus Nigrum"- La obra en negro-, que lleva como protagonista al médico, filósofo y alquimista Zenón, de ambiente en la Europa del siglo XVI. Marguerite marca la transición entre la Edad Media y el Renacimiento. Zenón es un sábio con "la rabia del saber" que se ve expuesto a los prejuicios, dogmas religiosos y supersticiónes fuertemente arraigados en el pensamiento Europeo de aquél siglo.
Otra de sus obras más aclamadas es "Fuegos", escrita en 1935, y que alterna relatos basados en mitos clásicos con algunos fragmentos sobre la pasión amorosa, he aquí unos cuantos fragmentos extraidos de este libro:
-"Espero que este libro no sea leído jamás".
-"Soledad...yo no creo como ellos creen, no vivio como ellos viven,no amo como ellos aman...Moriré como ellos mueren".
-"No hay nada que temer. He tocado fondo. No puedo caer más bajo que tu corazón".
-"¿Adónde huir? Tú llenas el mundo. No puedo huir más que en ti".
-"Soporto tus defectos. Uno se resigna a los defectos de Dios. Soporto tu ausencia. Uno se resigna a la ausencia de Dios".

Ganadora de los premios Femina y Erasmus, en 1980 fue la primera mujer elegida miembro de número de la Academia francesa, aunque desde 1970 ya pertenecía a la Academia belga. Una de las más respetadas escritoras en lengua francesa, tras el éxito de Memorias de Adriano, siguió publicando novela, ensayo, poesía y tres volúmenes de memorias.
Existe una anécdota ya bien conocida del encuentro de esta autora con el célebre escritor Jorge Luis Borges. En 1986, seis días antes de la muerte de Borges, estos dos autores se encontraron en Ginebra, donde Marguerite le preguntó: "Borges, ¿cuándo saldrás del laberinto". Él le respondió: "Cuando hayan salido todos".
Yourcenar vivió la mayor parte de su vida en su casa Petite Plaisance, en Mount Desert Island, en el estado de Maine, y sus restos descansan en la misma isla junto a los de la compañera de toda su vida Grace Frick, en una sencilla tumba en el Brookside Cemetery de Somesville. La casa de ambas es ahora un museo dedicado a su memoria, abierto al público durante los veranos.
Legó sus archivos personales y literarios a la Harvard University de Cambridge. En su Houghton Library pueden ser consultados libremente miles de cartas, fotografías y manuscritos (cf. Marguerite Yourcenar additional papers: Guide), excepto algunos documentos, que quedarán liberados en 2057. En Bruselas, su ciudad natal, existe también, desde 1989, el CIDMY: Centre International de Documentation Marguerite Yourcenar, que atesora numerosos fondos gráficos y escritos y ofrece información puntual sobre actividades y publicaciones relacionadas con la autora.

3/11/14

Georg Trakl. Un clásico del expresionismo

El 3 de noviembre se conmemora el primer centenario de la muerte de Georg Trakl (Salzburgo, 1887-Cracovia, 1914),
acaecida durante la Primera Guerra Mundial en una dependencia psiquiátrica del ejército austro-húngaro. Hasta
entonces Trakl sólo había publicado en forma de libro una selección de poemas. En el momento de morir tenía en
imprenta otro título, Sebastián en sueños .
Aquel joven acosado por los tormentos mentales,
adicto al alcohol y los estupefacientes, es
comúnmente celebrado como una de las figuras
señeras del Expresionismo. Sus enigmáticos, sus
hermosos y encendidos poemas, pronto fueron
materia de reflexión para una muchedumbre de
intérpretes, Martin Heidegger entre ellos. No
tardaron en despertar interés allende las
fronteras del idioma alemán. También en España, Georg Trakl ha sido editado con
fortuna.
Poeta del derrumbe, de la corrosión y el pudrimiento, Trakl anticipó con su particular
simbología la caída del Imperio Austro-Húngaro. Gustó sobremanera de las imágenes
repulsivas. Sus poemas abundan en ratas, gusanos, carroña, sangre... Lo fascinó la
muerte, presente también en sus conversaciones cotidianas. Tuvo especial predilección
por la belleza violenta y las visiones de destrucción y ruina. Ya en la adolescencia se
familiariza con los libros de Baudelaire y Rimbaud, leídos en versión original. Nietzsche
fue otra presencia crucial en la formación literaria de este hombre tan dotado de
sensibilidad como carente de sosiego.
Nacido en Salzburgo, la ciudad de Mozart, el 3 de febrero de 1887, Trakl fue hijo de un
comerciante bondadoso que hizo cierta fortuna con su negocio de ferretería, y de una
madre a la que se atribuye un influjo altamente negativo en la conformación psíquica
del poeta. Mujer de frialdad extrema, dio a luz seis criaturas de las que apenas se
ocupó como no fuera para imponerles el aprendizaje de algún instrumento musical.
Con frecuencia se pasaba dos, tres o más días encerrada en su alcoba, sin relacionarse
con ningún miembro de la familia, consagrada obsesivamente a su colección de
antigüedades.
Es conocido el estrecho vínculo que unió al poeta con Grete, su hermana pequeña, seis
años menor que él, en la que al parecer veía un doble femenino de sí mismo. Se ha
especulado no poco acerca de la naturaleza incestuosa de dicha relación, si bien no
existen pruebas testimoniales que la abonen. No es menos cierto que una parte
considerable de la correspondencia epistolar entre los dos hermanos desapareció de
forma misteriosa tras la temprana muerte de ambos, lo que deja a oscuras importantes
zonas de su vida privada. Como su hermano, Grete, en parte inducida por él, sucumbió
al alcohol y las drogas. Abandonada por su marido, truncada su carrera de pianista,
llevó una vida de soledad y penuria en Berlín hasta su suicidio en 1917.
A edad temprana, Georg Trakl se aficionó al consumo de sustancias estupefacientes.
Visita asiduamente los burdeles de Salzburgo y gana, entre sus profesores y compañeros
de colegio, fama de raro. A pesar de no haber concluido el ciclo escolar, había
terminado los cursos suficientes como para poder estudiar Farmacia. Lo hizo en Viena,
ciudad que aborrecía, en la que asistió a la tertulia de Karl Kraus. Se diplomó de la
referida disciplina en 1910 con el título de Magister. Ejerció a rachas. Las reiteradas
tentativas por dedicarse a una profesión culminaron en fracaso. Trakl era incapaz de
llevar una vida ordenada. Lo aquejan frecuentes caídas en la depresión, ataques de
pánico, estados de delirio, de exaltación y embriaguez. A menudo ha de ser socorrido
económicamente por familiares y amigos.
El año anterior al estallido de la Gran Guerra, Trakl se incorporó a una sección militar
de farmacia. Un mes después solicitó el pase a la reserva, que le fue concedido. Los
hábitos insalubres y la poesía continúan determinando su vida. Se ha dicho de él que
escribió sus mejores poemas cuando más lo apretaba el sufrimiento. Algunos de ellos
aparecieron en revistas (en Der Brenner sobre todo) y periódicos. Estuvo a punto de
beneficiarse de una generosa donación de Ludwig Wittgenstein, el célebre autor del
Tractatus Logico-Philosophicus ; pero un ataque de ansia en el interior del banco le
impidió extraer el dinero. Optó entonces por enviar la suma íntegra del generoso
mecenas a su hermana Grete. Llegó entretanto la guerra y Trakl, contagiado del
entusiasmo general, marchó al frente del Este enrolado en una unidad sanitaria.
Las dantescas escenas de dolor, de cuerpos destrozados y muerte sangrienta que hubo
de presenciar terminaron de desquiciarlo. Luego de un intento de suicidio, que no logra
consumar por la intervención oportuna de sus compañeros, Trakl fue internado en una
dependencia psiquiátrica, donde, según el parte médico, expiró al anochecer del 3 de
noviembre de 1914 a consecuencia de una sobredosis de cocaína. Tenía 27 años.

Fuente

9/8/14

GARCÍA MÁRQUEZ Y VARGAS LLOSA.- DOS AMIGOS A PUÑETAZOS

Mucho se ha hablado acerca de la enemistad de los dos más grandes exponentes del boom literario latinoamericano. Generalmente se la asociaba a sus diferencias ideológicas, concretamente a la estrecha cercanía de García Márquez con el dictador cubano Fidel Castro y el liberalismo de Vargas Llosa.
Lo que todos sabían, era que los dos escritores habían sido íntimos amigos hace ya mucho tiempo y que había sido tan fuerte dicha amistad que incluso Vargas Llosa publicó a manera de tesis doctoral en España su "Historia de un deicidio", documento de casi 700 páginas donde cataloga a García Márquez como un dios que crea su universo propio, le da vida y lo maneja magistralmente a su antojo en su libro Cien años de soledad. Esta amistad había empezado en 1966 cuando ambos escritores -ya con algún prestigio- habían intercambiado algunas cartas contemplando la idea de escribir una novela juntos acerca de la guerra que sus dos países mantuvieron en 1932.
La cordial relación que había comenzado por cartas y telefónicamente durante largos meses (el uno en México y el otro en Barcelona) se afianzó cuando pudieron encontrarse por primera vez el 1 de agosto de 1967 en Caracas, pocas semanas después de la aparición de Cien años de soledad y con ocasión del Premio Rómulo Gallegos para Vargas Llosa.
Durante los nueve años siguientes compartieron Barcelona, viajaron, hablaron, comieron, apadrinaron a sus hijos (Mario fue el padrino de uno) y compartieron amigos comunes. Se apoyaron y se animaron, asistieron a las crisis suscitadas por la Revolución Cubana y fueron felices a tal punto que para García Márquez, el peruano era “el último caballero andante de la literatura”, y para Vargas Llosa, el colombiano era el “Amadís de América”.
Se deshacían en elogios mutuos.Bonita amistad pero inexplicablemente el 12 de febrero de 1976, Mario Vargas Llosa noqueó de un tremendo puñetazo a Gabriel García Márquez dentro de las instalaciones de un cine mexicano.
Enseguida la prensa se hizo eco y buscaba explicaciones ante la brutal reacción de Vargas Llosa en contra de su "amigo del alma", pero ninguno de los dos ofreció explicaciones y el incidente -salvo la inicial publicidad- fue quedando en el olvido. Pasaron más de 30 años y nadie entendió por qué de un momento a otro este par de escritores se convirtieron en enemigos. ¿Que podría haber motivado la ruptura de tan estrecha amistad? Pues la respuesta a esa interrogante la dio hace unos tres años el fotógrafo personal de García Márquez, Rodrigo Moya, y es una historia bastante curiosa.
Era de noche y varios intelectuales se habían congregado en un cine de ciudad de México para asistir a la proyección de La odisea de los Andes, un filme que narra la aventura del grupo de uruguayos que pasó 72 días entre las nieves de la cordillera de los Andes y que practicó el canibalismo para sobrevivir, y cuyo guión había sido escrito por Mario Vargas Llosa. Al terminar la película hubo un momento de distensión con bebidas y bocadillos. García Márquez, que estaba acompañado por su esposa, divisó de lejos al amigo Vargas Llosa. Se dirigió a abrazarlo. Alcanzó a decirle sonriendo: "Mario..." y recibió el tremendo puñetazo, un derechazo entre el ojo izquierdo y la nariz. Vargas Llosa le gritó "¡Cómo te atreves a venir a saludarme después de lo que le hiciste a Patricia en Barcelona!"
Con una abundante hemorragia, entre los gritos y algunos sollozos de las damas presentes, sentado en el suelo, perplejo por lo que había ocurrido y no terminaba de entender, Gabo fue socorrido de inmediato. Un escritor mexicano corrió a buscar un trozo de carne que le fue aplicado en el ojo golpeado al glorioso escritor colombiano para absorber la hinchazón. Mientras tanto, Vargas Llosa se retiró tras el incidente. Los dos ex amigos nunca más volvieron a hablarse. Pero ¿cómo sabía tanto el fotógrafo? Pues Moya cuenta en su relato que Gabo y su mujer fueron a su domicilio a los dos días de la agresión, para que le tomase algunas fotos con el ojo morado con el fin de presentar una denuncia en contra del escritor peruano. Parece ser que esta denuncia no se concretó. Sobre el incidente del puñetazo, el escritor colombiano Juan Gossaín también ha dado su versión: Sucede que mientras vivían en Barcelona, Mario Vargas Llosa se voló para Estocolmo con una azafata sueca, por la que incluso abandonó su hogar. Ante esa situación, García Márquez, aconsejado por su propia esposa, habló con la de Vargas Llosa sugiriéndole que le pidiera el divorcio. Y como suele suceder, después del pequeño affaire Mario volvió a su hogar y se reconcilió con su sufrida esposa, quien luego le contaría sobre la recomendación de su amigo Gabo, el que a su vez por entrometido quedó con un ojo morado.

Imagen: Vargas Llosa con su mujer, Patricia; José Donoso y su esposa Pilar Serrano; García Márquez y su mujer Mercedes Barcha

13/1/14

Medio Pan y un Libro

"Cuando alguien va al teatro, a un
concierto o a una fiesta de cualquier
índole que sea, si la fiesta es de su
agrado, recuerda inmediatamente y
lamenta que las personas que él
quiere no se encuentren allí. ‘Lo que
le gustaría esto a mi hermana, a mi
padre', piensa, y no goza ya del
espectáculo sino a través de una
leve melancolía. Ésta es la
melancolía que yo siento, no por la
gente de mi casa, que sería pequeño
y ruin, sino por todas las criaturas
que por falta de medios y por
desgracia suya no gozan del
supremo bien de la belleza que es
vida y es bondad y es serenidad y es
pasión.
Por eso no tengo nunca un libro,
porque regalo cuantos compro, que
son infinitos, y por eso estoy aquí
honrado y contento de inaugurar
esta biblioteca del pueblo, la
primera seguramente en toda la
provincia de Granada.
No sólo de pan vive el hombre. Yo, si
tuviera hambre y estuviera desvalido
en la calle no pediría un pan; sino
que pediría medio pan y un libro. Y
yo ataco desde aquí violentamente a
los que solamente hablan de
reivindicaciones económicas sin
nombrar jamás las reivindicaciones
culturales que es lo que los pueblos
piden a gritos. Bien está que todos
los hombres coman, pero que todos
los hombres sepan. Que gocen todos
los frutos del espíritu humano
porque lo contrario es convertirlos
en máquinas al servicio de Estado,
es convertirlos en esclavos de una
terrible organización social.
Yo tengo mucha más lástima de un
hombre que quiere saber y no
puede, que de un hambriento.
Porque un hambriento puede calmar
su hambre fácilmente con un pedazo
de pan o con unas frutas, pero un
hombre que tiene ansia de saber y
no tiene medios, sufre una terrible
agonía porque son libros, libros,
muchos libros los que necesita y
¿dónde están esos libros?
¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una
palabra mágica que equivale a decir:
‘amor, amor', y que debían los
pueblos pedir como piden pan o
como anhelan la lluvia para sus
sementeras. Cuando el insigne
escritor ruso Fedor Dostoyevsky,
padre de la revolución rusa mucho
más que Lenin, estaba prisionero en
la Siberia, alejado del mundo, entre
cuatro paredes y cercado por
desoladas llanuras de nieve infinita;
y pedía socorro en carta a su lejana
familia, sólo decía: ‘¡Enviadme libros,
libros, muchos libros para que mi
alma no muera!'. Tenía frío y no
pedía fuego, tenía terrible sed y no
pedía agua: pedía libros, es decir,
horizontes, es decir, escaleras para
subir la cumbre del espíritu y del
corazón. Porque la agonía física,
biológica, natural, de un cuerpo por
hambre, sed o frío, dura poco, muy
poco, pero la agonía del alma
insatisfecha dura toda la vida.
Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal,
uno de los sabios más verdaderos de
Europa, que el lema de la República
debe ser: ‘Cultura'. Cultura porque
sólo a través de ella se pueden
resolver los problemas en que hoy se
debate el pueblo lleno de fe, pero
falto de luz.

Federico García Lorca

Medio Pan y un Libro. Al pueblo de
Fuente Vaqueros (Granada).
Septiembre de 1931.

1/1/14

HEMINGWAY Y LAS VACAS

En los inciertos días de la guerra fría
entre Estados Unidos y la Unión
Soviética, unos periodistas le
preguntaron al Ernest Hemingway si
tenía ideas políticas y este les
contesto:
- Por supuesto. Creo que el socialismo
se define de la siguiente manera: Si
tienes dos vacas, le das una a tu
vecino. El fascismo, en cambio,
consiste en que si tienes dos vacas,
el gobierno te las quita y luego te da
permiso para comprar la leche. El
comunismo por otro lado, consiste en
que si tienes dos vacas, el gobierno
te las quita.
-¿Y la leche? -preguntaron los
periodistas al unísono
- Bueno, si preguntas por la leche, el
gobierno se limita a condenarte a
unos años de trabajos forzados

EDGAR ALLAN POE AL DESNUDO

Los poemas y relatos de terror de
Edgar Allan Poe le han procurado una
fama imperecedera, pero a pesar de
su talento con la pluma y el papel,
en su juventud se vio en la necesidad
de enrolarse en el ejército para poder
sobrevivir. Tras un par de años
alcanzó el grado sargento mayor de
artillería (el más alto rango de
suboficiales), ingresando
posteriormente en la Academia
Militar de West Point, lugar en el que
su dudosa vocación militar se
tambaleó y le hizo buscar
desesperadamente su expulsión,
comenzando desde entonces a faltar
a determinadas clases o a no ir a la
iglesia. Cierto día, las instrucciones
diarias para la formación le indicaban
que debía llevar cintos blancos con
guantes y armas, algo que hizo
pensar a Poe. El poeta se presentó a
la formación desnudo pero por
supuesto con su cinto, los guantes y
las armas, lo que evidentemente
provocó la ansiada expulsión poco
después.
No parece que dejara muy mal
recuerdo entre sus compañeros de
milicia y así para publicar su tercer
libro de poemas, titulado "Poems",
tuvo la ayuda de todos ellos (cada
uno puso 75 centavos, con los que
llegaría a sumar 170 dólares). Sus
compañeros, acostumbrados a los
poemas satíricos que dedicaba en la
Academia a sus superiores se
sorprendieron gratamente con la
enorme calidad de los versos
publicados y Poe en agradecimiento
colocó en el libro la siguiente
dedicatoria: "Este libro está
respetuosamente dedicado al Cuerpo
de Cadetes de los Estados Unidos"

BALZAC O EL "TANTO TIENES TANTO VALES"

Honoré de Balzac (1799-1850) era un
verdadero portento creativo, su
capacidad de trabajo era abrumadora
y gracias a su dedicación y a la
inestimable ayuda de litros y litros
de café logró edificar la mayor parte
de ese colosal proyecto que era "La
comedía humana"; una serie de
novelas que habían de sumar 137
volúmenes y de las que llegó a
finalizar 85 antes de morir a los 51
años. Una obra en la que intentaba
representar de forma detallada la
sociedad francesa en su conjunto,
tanto que Balzac apuntaba que su
pretensión era hacerle la
competencia al registro civil. El caso
es que si bien era metódico a la hora
de escribir, en sus inicios también lo
era a la hora de embarcarse en
negocios ruinosos que lo llenaron de
deudas y lo obligaron a buscarse la
vida como buenamente podía.
De este modo cuando todavía no era
famoso llevó a un editor una de sus
novelas. Este después de leerla se
mostró totalmente entusiasmado y
sin esperar a que Balzac volviera para
recibir respuesta, se lanzó a buscarle
para conseguir los derechos de la
obra, pensando que al menos debería
ofrecerle 3000 francos por la misma.
Una vez supo que el barrio en el que
vivía el escritor se ubicaba en una
zona bastante humilde en el
extrarradio de la ciudad, pensó que
quizás la cifra que tenía en mente
era excesiva y se decidió a ofrecerle
tan sólo 2000 francos. Cuando llegó
al inmueble donde se alojaba Balzac
y supo que vivía en una sexta planta,
intuyendo ya las dificultades del
escritor redujo mentalmente su oferta
a 1000 francos. Finalmente cuando
entró en el modesto apartamento
encontró al escritor mojando un
mendrugo de pan en un vaso de agua
y sabedor que cualquier cantidad de
dinero que le ofreciera sería sin duda
bien recibida, le dijo como buen
cicatero "Aquí tiene trescientos
francos por los derechos de su
novela".
Balzac, como no, aceptó de buen
grado aquel dinero que le llegaba.
Puede que con él comprara más café

ANDRE MALRAUX: EL ESCRITOR COMPROMETIDO

"He aprendido que una vida no vale
nada, pero también que nada vale
una vida."
Así se expresaba, Andre Malraux, un
personaje ciertamente representativo
de la cultura francesa del segundo
tercio del siglo XX, gracias a su labor
como narrador, historiador, ensayista,
aventurero y por último, hombre de
estado. En su vida se confunden los
elementos novelados del escritor con
la expresión del hombre público, la
propaganda del político y la realidad
de los hechos históricos que vivió.
Esta mezcolanza ha llevado a alguno
de sus críticos, como el biógrafo
Olivier Todd a considerar a Malraux
el primer escritor de su generación
que logró edificar de una manera
eficaz su propio mito.
André padecía el Síndrome de
Tourette, una afección que provocaba
las características muecas, guiños y
tics que tanto le distinguieron en
vida durante sus apariciones públicas
y entrevistas.
Andre Malraux cimentó su posicion
en la vanguardia literaria francesa
con su galardonada novela "La
condición humana. Para Malraux, la
condición humana era en esencial un
asunto un tanto desdichado y
solitario, pero creía que a la salvación
se llegaba uniendose a otros en un
compromiso político directo, y por
medio de la creatividad. Sus novelas
llenas de accion pero inquisitivas,
como la temprana "Los
conquistadores" y la posterior "La
esperanza" reflejan directamente la
participación personal de Malraux en
las actividades revolucionarias en el
lejano oriente y en España, durante
las décadas de 1920 y 1930. A partir
de la década de 1940 Malraux se
concentró en escribir sobre el arte y
creo su obra maestra "Las voces del
silencio"
Nacido en 1901 como Georges-André
Malraux, su padre, Fernand, era un
agente de bolsa apasionado por los
inventos y la mecánica, que primero
abandonó a su familia y luego se
suicidó. André pasó una infancia
acomodada en Bondy, suburbio de
clase media en las afueras de París,
en compañía de su madre Berthe, su
tía y su abuela quienes regentaban
una pastelería. A pesar de no sufrir
estrecheces económicas y de disponer
de una educación privada y un
reducido grupo de buenos amigos, el
escritor resumió en las primera líneas
de sus Antimemorias aquella etapa
de su vida: casi todos los escritores
que conozco recuerdan con cariño su
infancia, yo odio la mía.
A los diecisiete años abandonó los
estudios secundarios, pero pronto
adquirió una vasta cultura
autodidacta y se integró en los
medios literarios y artísticos
parisinos.
Participó en las tendencias de
vanguardia de la inmediata
posguerra, en especial el cubismo.
Colaboró en Action, revista de este
movimiento y en 1921 fue contratado
como editor de la Galería de Arte
Simon; allí apareció su primer
trabajo, Lunes en papel, ilustrado por
Fernand Léger y dedicado a M. Jacob.
En 1922 comenzó su colaboración en
la Nouvelle Revue Française. Viajó por
Europa y visitó numerosos museos.
Su pasión por el arte jemer lo llevó a
emprender, a finales de 1923, una
expedición arqueológica a la selva
camboyana. Allí descubrió, en un
templo abandonado, bajorrelieves
que extrajo con la intención de
venderlos en Europa. La aventura le
costó la cárcel, pero finalmente fue
absuelto. Regresó a Francia pero
volvió pronto a Saigón, en enero de
1925, para fundar un periódico: L
´Indochine, que desapareció al año
siguiente a instancias de las
autoridades coloniales.
La doble experiencia de la sociedad
colonial y del periodismo de opinión
desempeñó un papel decisivo en la
vida de Malraux: paralelamente a su
descubrimiento de Oriente, tomó
conciencia de las realidades políticas
y sociales y adquirió la reputación de
escritor comprometido que orientó su
vida y su obra.
A su regreso a Francia, publicó La
tentación de Occidente (1926), un
"ensayo-novela" que confrontaba un
Oriente de sabiduría y un Occidente
en crisis. A esta obra le siguieron tres
novelas, igualmente inspiradas por
sus contactos con Asia, en las que
abordó los grandes problemas éticos
del siglo XX: Los conquistadores
(1928), La vía real (1930) y La
condición humana (1933); esta última
se convertiría en su libro más
célebre.
Con la llegada al poder de Adolf
Hitler, se hizo "compañero de ruta"
del partido comunista. El tiempo del
desprecio (1935), dedicado a las
víctimas del nazismo, abrió un nuevo
ciclo novelesco, ligado a la lucha
contra los fascismos. Participó en la
Guerra Civil española junto a los
republicanos e intervino en combates
aéreos con las brigadas
internacionales. Fruto de esa
experiencia fue la novela épica La
Esperanza (1937), de la que al año
siguiente hizo una adaptación
cinematográfica.
En 1939 abandonó el partido
comunista y poco después fue
movilizado como voluntario en
Francia. Capturado y luego liberado,
rehusó comprometerse contra la
ocupación por desconfianza en la
influencia de los comunistas dentro
del movimiento de la Resistencia y se
consagró a la escritura. Incorporado
finalmente a la Resistencia en la
primavera de 1944, fue detenido por
la Gestapo en julio pero un mes
después fue liberado por la
precipitada retirada de los alemanes
de su país.
Al año siguiente tuvo un encuentro
con Charles de Gaulle, de cuyo
gobierno provisional (1945-1946) fue
ministro de Información y al que
benefició con su talento de orador,
denunciando públicamente la
influencia del comunismo y la
propaganda estalinista en el Epílogo
a Los conquistadores (1948). En 1951
publicó Las voces del silencio, el más
importante de sus escritos sobre arte,
donde defendió la libertad del artista
contra los determinismos, tanto del
marxismo como del psicoanálisis.
Dedicó igualmente tres volúmenes a
Los museos imaginarios de la
escultura mundial (1952 a 1955) y
publicó la primera parte de lo que
sería una gran epopeya de las artes:
La metamorfosis de los dioses (1957).
Después del regreso al poder de De
Gaulle en 1958, se convirtió en
ministro de Cultura, entre 1959 y
1969.
En 1967 apareció Antimemorias, en
1971, Les Chênes quon abat, relato
de su última entrevista con De
Gaulle; en 1974, La cabeza de
obsidiana, luego Lázaro (1974) y Hôtes
de passage (1975). Además de sus
ensayos autobiográficos, publicó una
segunda parte de La metamorfosis de
los dioses, titulada Lo irreal (1974) y
luego una tercera, Lo intemporal
(1976). En 1977 apareció,
póstumamente, su único trabajo
consagrado a la creación literaria,
síntesis de innumerables prólogos y
artículos dispersos: L´Homme
précaire et la Littérature.

LOS LIBROS VIAJEROS DE CORTÁZAR

Cortázar llenaba sus libros de notas y
comentarios, a lápiz, y con pluma, y
con rotulador y con cualquier cosa
que tuviera a mano. Anotaba en
francés, inglés o castellano,
dependiendo del idioma en que
estuviera leyendo, no como Mallarmé
cuyos libros, decía, sólo hablaban
francés.
Me contaron de Cortázar una historia
fantástica; la de esa biblioteca
deshojada, volandera, en Italia.
Viajaba con su mujer, Aurora, a
mediados de los años cincuenta, en
tren, y para no cargar con un
equipaje innecesario, acostumbraban
a comprar libros en las librerías de
las estaciones, para los trayectos.
Compraban un título que leían
juntos, en general primero Julio que,
cuando terminaba una página, la
arrancaba y se la pasaba a Aurora,
sentada a su lado, que cuando
acababa de leerla la arrojaba por la
ventanilla.
De modo que habrá en alguna parte
una biblioteca perdida de Cortázar,
una biblioteca secreta. Tal vez para
encontrarla sea preciso seguir las vías
férreas por toda Italia, de norte a sur
y de este a oeste, recogiendo las
páginas que Aurora y Julio, Julio y
Aurora arrojaban al tren.

Jesús Marchamalo, Tocar los libros,
Centro Superior de Investigaciones
Científicas, 2008, pág. 63

29/12/13

LA INMORTALIDAD. Jorge Luis Borges

..."Nuestro yo es lo menos importante
para nosotros. Qué significa sentirnos
yo? En que pueda diferir que yo me
sienta Borges de que ustedes se
sientan A. B. o C? En nada,
absolutamente. Ese yo es lo que
compartimos, es lo que está presente,
de una forma o de otra, en todas las
criaturas. Entonces podríamos decir
que la inmortalidad es necesaria, no
la personal pero sí esa otra
inmortalidad. Por ejemplo cada vez
que alguien quiere a un enemigo,
aparece la inmortalidad de Cristo. En
ese momento el es Cristo. Cada vez
que repetimos un verso de Dante o
de Shakespeare, somos, de algún
modo, aquel instante en que Dante o
Shakespeare crearon ese verso. En
fin, la inmortalidad está en la
memoria de los otros y en la obra
que dejamos. Qué puede importar
que esa obra sea olvidada?
Yo he dedicado estos últimos veinte
años a la poesía anglosajona, sé
muchos poemas anglosajones de
memoria. Lo único que no sé es el
nombre de los poetas. ¿Pero qué
importa eso?
¿Qué importa si yo, al repetir poemas
del siglo IX estoy sintiendo algo que
alguien sintió en ese siglo? Él está
viviendo en mi en ese momento que
yo no soy ese muerto. Cada uno de
nosotros es, de algún modo, todos los
hombres que han muerto antes. No
sólo los de nuestra sangre.
Desde luego heredamos cosas de
nuestra sangre. Yo sé - mi madre me
lo dijo-que cada vez que repito versos
ingleses, los repito con la voz de mi
padre. (Mi padre murió en 1938
cuando se dio muerte Lugones)
Cuando yo repito versos de Schiller
mi padre está viviendo en mi Las
otras personas que me han oído a mí,
vivirán mi voz que es un reflejo de su
voz que fue, quizás un reflejo de la
voz de sus mayores. ¿Qué podemos
saber nosotros? Es decir podes crear
en la inmortalidad.
Cada uno de nosotros colabora, de un
modo u otro en este mundo. Cada
uno de nosotros quiere que este
mundo sea mejor, y si el mundo
realmente mejora, eterna esperanza;
si la patria se salva (¿por qué no
habría de salvarse la patria?)
nosotros seremos inmortales en esa
salvación no importa que se sepan
nuestros nombres o no. Eso es lo
mínimo, lo importante es la
inmortalidad. Esa inmortalidad que
se logra en la obras, en la memoria
que uno deja en los otros. Esa
memoria puede ser nimia. Puede ser
una frase cualquiera. Por ejemplo:
“Fulano de tal, más vale perderlo que
encontrarlo” Y no se quien inventó
esa frase pero cada vez que la repito
soy ese hombre. Qué importa que ese
modesto compadrito haya muerto, si
vive en mí y en cada uno que repita
esa frase.
Lo mismo puede decirse de la música
y del lenguaje. El lenguaje es una
creación viene a ser una especie de
inmortalidad. Yo estoy usando la
lengua castellana. ¿Cuántos muertos
castellanos están viviendo en mí? No
importa mi opinión, ni mi juicio; no
importan los nombres del pasado si
continuamente estamos ayudando al
porvenir del mundo, a la
inmortalidad, a nuestra inmortalidad.
Esa inmortalidad no tiene porque ser
personal, puede prescindir del
accidente de nombres y apellidos
puede prescindir de nuestra
memoria. ¿Para qué suponer que
vamos a seguir en otra vida con
nuestra memoria, como si yo siguiera
pensando toda mi vida en mi
infancia, en Palermo, en Adrogué o en
Montevideo? ¿Por qué estar siempre
volviendo a eso? Es un recurso
literario; yo puedo olvidar todo eso y
seguiré siendo, y todo eso vivirá en
mí aunque yo no lo nombre. Quizá lo
más importante es lo que no
recordamos de un modo preciso,
quizá lo más importante lo
recordaremos de un modo
inconsciente.
Para concluir diré que creo en la
inmortalidad: no en la inmortalidad
personal, pero si en la cósmica.
Seguiremos siendo inmortales; más
allá de nuestra muerte corporal
queda nuestra memoria, y más allá
de nuestra memoria quedan nuestros
actos, nuestros hechos, nuestras
actitudes, toda esa maravillosa parte
de la historia universal aunque no lo
sepamos y es mejor que no lo
sepamos..."

10/10/13

CARTA DE FRANCIS SCOTT FITZGERALD A SU HIJA "SCOTTIE"

Querido Bombón:
Estoy muy interesado en tus tareas.
¿Podrías darme un poco más de
información acerca de tus lecturas en
francés? Me alegra que estés
contenta, pero no creo demasiado en
la felicidad. Tampoco creo nunca en
la desgracia. Esas son cosas que ves
en un escenario o en una pantalla o
en una hoja impresa, nunca te
seceden a ti en la vida.
Todo lo que creo en la vida es en la
recompensa por la virtud (de acuerdo
a los talentos de uno) y en los
castigos por no cumplir con tus
tareas, que son doblemente
despiadados. Si hay un libro así en la
biblioteca del colegio, ¿podrías
rogarle a la señora Tyson que te
permita buscar un soneto de
Shakespeare en el que aparece el
verso: "Los lirios que se pudren
huelen mucho peor que la mala
hierba"?
Hoy no he tenido pensamientos, la
vida parece consistir en pensar un
cuento para Saturday Evening Post.
Pienso en ti, y siempre con placer,
pero si me llamas Pappy otra vez
agarraré al Gato Blanco y lo aporrearé
duro en el trasero, seis veces cada
vez que seas impertinente. ¿Harás
algo al respecto?
Arreglaré la cuestión de tu cuota.
Ya termino, boba. Cosas de las cuales
preocuparse:
Preocúpate por el coraje.
Preocúpate por la limpieza
Preocúpate por la eficiencia
Preocúpate por la equitación...
Cosas de las cuales no preocuparte:
No te preocupes por la opinión
general
No te preocupes por las muñecas
No te preocupes por el pasado
No te preocupes por el futuro
No te preocupes por el crecimiento
No te preocupes si alguien te saca
ventaja
No te preocupes por la victoria
No te preocupes por la derrota
excepto que se deba a tu culpa
No te preocupes por los mosquitos
No te preocupes por las moscas
No te preocupes por los insectos en
general
No te preocupes por tus padres
No te preocupes por los varones
No te preocupes por las decepciones
No te preocupes por los placeres
No te preocupes por las
satisfacciones.
Cosas en las cuales pensar:
¿Qué es lo que realmente estoy
buscando?
Cuán bueno soy realmente en
relación con mis contemporáneos en
cuanto a:
El estudio.
¿De verdad entiendo a la gente y soy
capaz de llevarme bien con ella?
¿Estoy intentando realmente hacer de
mi cuerpo un instrumento útil o lo
estoy ignorando?
Con todo amor.

8 de agosto de 1933

En la foto podemos ver al escritor
Francis Scott Fitzgerald junto a su
esposa Zelda y a la hija de ambos,
Frances Scott (Scottie) Fitzgerald.

ALBERT CAMUS Y SU "ABSURDA MUERTE"

El 4 de enero de 1960 muere Albert
Camus en un accidente de tráfico, en
la carretera nacional francesa n° 5,
en una recta sin obstáculos, cerca de
Le Petit-Villeblevin. Parece ser que
fue un accidente provocado por el
exceso de velocidad con el que
conducía su Facel Vega el editor
Michel Gallimard (sobrino del
patriarca Gaston Gallimard) Una
muerte absurda: el día antes de la
suya, y refiriéndose a la muy reciente
de Fausto Coppi, el campeón del
ciclismo, Albert Camus había dicho:
«No conozco nada más idiota que
morir en un accidente de auto».

7/10/13

KAREN BLIXEN (ISAK DINESEN)

“Yo tenía una granja en África, al pie
de las colinas de Ngong. El ecuador
atravesaba aquellas tierras altas a un
centenar de millas al norte, y la
granja se asentaba a una altura de
unos seis mil pies. Durante el día te
sentías a una gran altitud, cerca del
sol, las primeras horas de la mañana
y las tardes eran límpidas y
sosegadas, y las noches frías.(...)Todo
lo que se veía estaba hecho para la
grandeza y la libertad, y poseía una
inigualable nobleza. (...)Allí arriba
respirabas a gusto y absorbías
seguridad y ligereza de corazón. En
las tierras altas te despertabas por
mañana y pensabas: -Estoy donde
debo estar-” (Isak Dinesen, Memorias
de África)
Karen Christence Blixen-Finecke,
nacida Karen Christenze Dinesen, más
conocida por su pseudónimo literario
Isak Dinesen(Rungsted, Dinamarca,
17 de abril de 1885 – ibídem, 7 de
septiembre de 1962), no tuvo una
infancia fácil. Su padre, Whihelm
Dinesen, militar, parlamentario, se
suicidó cuando ella tenía diez años,
atormentado por no resistir la presión
de padecer sífilis, enfermedad que en
aquella época estaba estigmatizada.
Su madre, Ingeborg Westenholz,
quedó sola con cinco hijos a su
cargo, a los que pudo mantener
gracias a la ayuda familiar. Karen,
como sus hermanas, se educó en
prestigiosas escuelas suizas y se la
educó para las clases altas. Karen se
casó con su primo lejano el barón
Bror Blixen-Finecke, con quien inició
en Kenia una plantación de café
llamada The Karen Coffee Company.1
El matrimonio fue difícil. En el primer
año de vida en común su marido le
contagió de la temida sífilis, sin
embargo la enfermedad nunca se
manifestó de manera grave. Cansada
de las infidelidades de su marido, se
separaron tras seis años de
matrimonio, quedándose ella con la
plantación.
Aprendió las lenguas aborígenes,
como el suaheli, y se empapó de las
costumbres locales. Los nativos la
apodaban "La hermana leona" y se
ganó el afecto de ellos por su coraje,
su buena puntería y su habilidad
como cazadora.
En Nairobi, Blixen conoció a Denys
Finch Hatton, un cazador británico
afincado en Kenia. Empezaron una
relación amorosa intensa, pero con
muchos altibajos.
En 1931, Denys Finch Hatton se mató
en su avión Gipsy Moth. Blixen siguió
a cargo de la plantación hasta que la
caída de los precios del café en 1931
la obligaron a venderla y regresar a
Dinamarca. Siempre pensó en volver
pero la Segunda Guerra Mundial se lo
impidió.Si bien ya había publicado
algunos trabajos, es entonces cuando
comienza su carrera literaria bajo
diversos seudónimos, el más conocido
de los cuales es Isak Dinesen, con el
cual publicó una serie de apuntes
autobiográficos sobre su vida en
África. Pero fue su libro Memorias de
África(1937) el que sin duda la
catapultó a la fama a nivel mundial;
inspirada en el libro se filmó la
premiada película Memorias de África
con Meryl Streep en el papel de
Karen y Robert Redford como Dennys
Finch Hatton.
El asteroide (3318) Blixen fue llamado
así en su honor

OSCAR WILDE EL HOMBRE QUE CONTABA HISTORIAS

Había una vez un hombre muy
querido de su pueblo porque contaba
historias. Todas las mañanas salía
del pueblo y, cuando volvía por las
noches, todos los trabajadores del
pueblo, tras haber bregado todo el
día, se reunían a su alrededor y le
decían:
-Vamos, cuenta, ¿qué has visto hoy?
Él explicaba:
-He visto en el bosque a un fauno
que tenía una flauta y que obligaba a
danzar a un corro de silvanos.
-Sigue contando, ¿qué más has visto?
-decían los hombres.
-Al llegar a la orilla del mar he visto,
al filo de las olas, a tres sirenas que
peinaban sus verdes cabellos con un
peine de oro.
Y los hombres lo apreciaban porque
les contaba historias.
Una mañana dejó su pueblo, como
todas las mañanas... Mas al llegar a
la orilla del mar, he aquí que vio a
tres sirenas, tres sirenas que, al filo
de las olas, peinaban sus cabellos
verdes con un peine de oro. Y, como
continuara su paseo, en llegando
cerca del bosque, vio a un fauno que
tañía su flauta y a un corro de
silvanos... Aquella noche, cuando
regresó a su pueblo y, como los otros
días, le preguntaron:
-Vamos, cuenta: ¿qué has visto?
Él respondió:
-No he visto nada.
El cuadro es obra de William Adolphe
Bouguereau y tiene por título "Ninfas
y satiro"

LA CURIOSA MUERTE DE TENNESSEE WILLIAMS

"No esperes al día en que pares de
sufrir, porque cuando llegues sabrás
que estás muerto"
Eso al menos decía el excelente
escritor Tennessee Williams, alguien
que paró de sufrir de una manera
realmente curiosa. Williams es un
autor cuya obra engrandeció el
mundo del teatro y también el del
cine. En 1948 ganó el Premio Pulitzer
de teatro por "Un tranvía llamado
Deseo", y en 1955 por "La gata sobre
el tejado de zinc. Además de estas
dos obras recibieron el premio de la
Crítica Teatral de Nueva York: "El zoo
de cristal" (1945) y "La noche de la
iguana" (1961), resultando algunas de
ellas verdaderos éxitos también en el
mundo del cine, impagables para los
buenos amantes del llamado séptimo
arte.
Tennesse Williams falleció en 1983,
a la edad de 71 años, y que en los
primeros momentos hubo
especulaciones de todo tipo alrededor
de su extraña muerte, llegándose
incluso a hablar de asesinato. La
realidad era muy distinta y bastante
más ridícula. Tennessee Williams
llevaba tiempo viviendo en el Hotel
Elysse de Nueva York y tras la muerte
de su pareja, Frank Merlo, se había
acercado más de lo debido a los
calmantes y al alcohol, algo que
unido a su natural tendencia a sufrir
ataques de pánico, había deteriorado
notablemente su salud, tanto física
como mental. Tras la exploración
médica del cadáver se encontró en el
mismo "un tapón de plástico del tipo
de los botes de spray nasal o colirio”
con el que se supuso se había
ahogado.
Meses después, llegó el informe
médico final y que es actualmente la
versión oficial de la muerte del
escritor. En el se detallaba que tras
beber una considerable cantidad de
alcohol, el escritor tuvo la intención
de tomar una dosis de barbitúricos,
de los cuales no se encontró resto
alguno en su estomago, pero si el
tapón en su garganta y el frasco en la
habitación por la que estaban
derramadas todas sus pastillas. A la
vista de todo ello se dedujo que al
intentar abrir el frasco de
medicamentos con la boca, se tragó
accidentalmente el tapón, que tras
alojarse en la garganta
obstruyéndola, le produjo la muerte
por asfixia. Ciertamente no se puede
decir precisamente que sea una
muerte de película…. para alguien al
que el cine le debe tanto.
La fotografía del escritor fue tomada
en 1956 por el famoso fotógrafo
Yousuf Karsh.

24/9/13

EL DERECHO AL DELIRIO - 1999

"Aunque no podemos adivinar el
tiempo que será, sí que tenemos, al
menos, el derecho de imaginar el que
queremos que sea. Las Naciones
Unidas han proclamado extensas
listas de derechos humanos; pero la
inmensa mayoría de la humanidad no
tiene más que el derecho de ver, oír y
callar.
¿Qué tal si empezamos a ejercer el
jamás proclamado derecho de soñar?
¿Qué tal si deliramos, por un ratito?
Al fin del milenio vamos a clavar los
ojos más allá de la infamia, para
adivinar otro mundo posible:
El aire estará limpio de todo veneno
que no venga de los miedos humanos
y de las humanas pasiones;
La gente no será manejada por el
automóvil, ni será programada por la
computadora, ni será comprada por el
supermercado, ni será mirada por el
televisor;
El televisor dejará de ser el miembro
más importante de la familia, y será
tratado como la plancha o el
lavarropas;
La gente trabajará para vivir, en lugar
de vivir para trabajar;
Se incorporará a los códigos penales
el delito de estupidez, que cometen
quienes viven por tener o por ganar,
en vez de vivir por vivir nomás, como
canta el pájaro sin saber que canta y
como juega el niño sin saber que
juega;
En ningún país irán presos los
muchachos que se nieguen a cumplir
el servicio militar, sino los que
quieran cumplirlo;
Los economistas no llamarán nivel de
vida al nivel de consumo, ni llamarán
calidad de vida a la cantidad de
cosas;
Los cocineros no creerán que a las
langostas les encanta que las hiervan
vivas;
Los historiadores no creerán que a los
países les encanta ser invadidos;
El mundo ya no estará en guerra
contra los pobres, sino contra la
pobreza, y la industria militar no
tendrá más remedio que declararse
en quiebra;
La comida no será una mercancía, ni
la comunicación un negocio, porque
la comida y la comunicación son
derechos humanos;
Nadie morirá de hambre, porque
nadie morirá de indigestión;
Los niños de la calle no serán
tratados como si fueran basura,
porque no habrá niños de la calle;
Los niños ricos no serán tratados
como si fueran dinero, porque no
habrá niños ricos;
La educación no será el privilegio de
quienes puedan pagarla;
La policía no será la maldición de
quienes no puedan comprarla;
La justicia y la libertad, hermanas
siamesas condenadas a vivir
separadas, volverán a juntarse, bien
pegaditas, espalda contra espalda;
Una mujer, negra, será presidenta de
Brasil y otra mujer, negra, será
presidenta de los Estados Unidos de
América; una mujer india gobernará
Guatemala y otra, Perú;
En Argentina, las locas de Plaza de
Mayo serán un ejemplo de salud
mental, porque ellas se negaron a
olvidar en los tiempos de la amnesia
obligatoria;
La perfección seguirá siendo el
aburrido privilegio de los dioses; pero
en este mundo, en este mundo
chambón y jodido, cada noche será
vivida como si fuera la última y cada
día como si fuera el primero."

EDUARDO GALEANO (1940/----)

22/9/13

JORGE LUIS BORGES POR ÉL MISMO

"Yo no bebo, no fumo, no escucho la
radio, no me drogo, como poco. Yo
diría que mis únicos vicios son El
Quijote, La divina comedia y no
incurrir en la lectura de Enrique
Larreta ni de Benavente."
"Yo no hablo de venganzas ni
perdones, el olvido es la única
venganza y el único perdón."
"Yo siempre seré el futuro Nóbel.
Debe ser una tradición escandinava."
"¿De qué otra forma se puede
amenazar que no sea de muerte? Lo
interesante, lo original, sería que
alguien lo amenace a uno con la
inmortalidad."
"Al cabo de los años he observado
que la belleza, como la felicidad, es
frecuente. No pasa un día en que no
estemos, un instante, en el paraíso."
"Antes las distancias eran mayores
porque el espacio se mide por el
tiempo."
"Biografías: Son el ejercicio de la
minucia, un absurdo. Algunas
constan exclusivamente de cambios
de domicilio."
"Creo que con el tiempo mereceremos
no tener gobiernos."
"Democracia: es una superstición muy
difundida, un abuso de la
estadística."
"Dicen que soy un gran escritor.
Agradezco esa curiosa opinión, pero
no la comparto. El día de mañana,
algunos lúcidos la refutarán
fácilmente y me tildarán de impostor
o chapucero o de ambas cosas a la
vez."
"Dólares: Son esos imprudentes
billetes americanos que tienen
diverso valor y el mismo tamaño."
"El infierno y el paraíso me parecen
desproporcionados. Los actos de los
hombres no merecen tanto."
"El tema de la envidia es muy
español. Los españoles siempre están
pensando en la envidia. Para decir
que algo es bueno dicen: "Es
envidiable".
"El tiempo es el mejor antologista, o
el único, tal vez."
"El tiempo es la materia de la que he
sido creado."
"Estoy solo y no hay nadie en el
espejo."
"Felices los valientes, los que aceptan
con ánimo parejo la derrota o las
palmas."
"Hay comunistas que sostienen que
ser anticomunista es ser fascista. Esto
es tan incomprensible como decir
que no ser católico es ser mormón."
"Hay que tener cuidado al elegir a los
enemigos porque uno termina
pareciéndose a ellos."
"He cometido el peor pecado que uno
puede cometer. No he sido feliz."
"He firmado tantos ejemplares de mis
libros que el día que me muera va a
tener un gran valor uno que no lleve
mi firma."
"He sospechado alguna vez que la
única cosa sin misterio es la felicidad,
porque se justifica por sí sola."
"La belleza es ese misterio hermoso
que no descifran ni la psicología ni la
retórica."
"La Biblioteca es una esfera cuyo
centro cabal es cualquier hexágono,
cuya circunferencia es inaccesible."
"La duda es uno de los nombres de la
inteligencia."
"La felicidad no necesita ser
transmutada en belleza, pero la
desventura sí."
"La Historia Universal es la de un solo
hombre."
"La literatura no es otra cosa que un
sueño dirigido."
"La muerte es una vida vivida. La vida
es una muerte que viene."
"La paternidad y los espejos son
abominables porque multiplican el
número de los hombres."
"La Universidad debiera insistirnos en
lo antiguo y en lo ajeno. Si insiste en
lo propio y lo contemporáneo, la
Universidad es inútil, porque está
ampliando una función que ya
cumple la prensa."
"Las tiranías fomentan la estupidez."
"Me gustaría ser valiente. Mi dentista
asegura que no lo soy."
"Nadie es patria, todos lo somos."
"No eres ambicioso: te contentas con
ser feliz."
"No he cultivado mi fama, que será
efímera."
"No sé hasta qué punto un escritor
puede ser revolucionario. Por lo
pronto, está trabajando con el
idioma, que es una tradición."
"Ordenar bibliotecas es ejercer de un
modo silencioso el arte de la crítica."
"Para el argentino, la amistad es una
pasión y la policía una mafia."
"Que cada hombre construya su
propia catedral. ¿Para qué vivir de
obras de arte ajenas y antiguas?"
"Que el cielo exista, aunque nuestro
lugar sea el infierno."
"Que otros se jacten de las páginas
que han escrito; a mi me
enorgullecen las que he leído."
"Quienes dicen que el arte no debe
propagar doctrinas suelen referirse a
doctrinas contrarias a las suyas."
"Quizá haya enemigos de mis
opiniones, pero yo mismo, si espero
un rato, puedo ser también enemigo
de mis opiniones."
"Si de algo soy rico es de
perplejidades y no de certezas."
"Si viéramos realmente el Universo,
tal vez lo entenderíamos."
"Siempre he sentido que hay algo en
Buenos Aires que me gusta. Me gusta
tanto que no me gusta que le guste a
otras personas."
"Es un amor así, celoso."
"Siempre imaginé que el Paraíso sería
algún tipo de biblioteca."
"Sólo aquello que se ha ido es lo que
nos pertenece."
"Somos nuestra memoria, somos ese
quimérico museo de formas
inconstantes, ese montón de espejos
rotos."
"Soñar es la actividad estética más
antigua."
"Todas las teorías son legítimas y
ninguna tiene importancia. Lo que
importa es lo que se hace con ellas."
"Uno está enamorado cuando se da
cuenta de que otra persona es
única."
"Uno no es lo que es por lo que
escribe, sino por lo que ha leído."
"Yo creo que es mejor pensar que
Dios no acepta sobornos."
"Yo creo que habría que inventar un
juego en el que nadie ganara."

20/9/13

LORD BYRON Y SU PERRO BOATSWAIN

Lord Byron tenía un gran aprecio por
los animales; de hecho se cuenta que
mientras estudiaba en Cambridge,
guardó un oso en una institución en
donde estaban prohibidos los
animales domésticos. En otras épocas
de su vida tuvo de compañía a los
más variados animales, desde zorros
a águilas, pasando por monos, loros,
gatos y un curioso etc. Pero su cariño
llegó a cotas dignas de recordar en el
caso de su perro, por el que fue
capaz de poner en riesgo su propia
vida. El caso es que en cierta ocasión
que viajaba a bordo de un barco, su
magnífico perro de raza terranova,
llamado "Boatswain" (que se podría
traducir por "contramaestre") cayó al
agua y el famoso escritor de "El
corsario" exigió al capitán que parara
la nave y enviara a alguien a rescatar
al animal. Como quiera que el
capitán le contestó que solo podía
hacer una cosa así cuando era una
persona la que estaba en el agua,
Byron se tiró al mar y tras coger al
perro pidió nuevamente al capitán
que parara la nave, ahora sí, con un
hombre a quien salvar. No es de
extrañar que Lord Byron dijera con el
tiempo: "Cuanto más conozco a los
hombres más aprecio a mi perro". De
hecho cuando "Boatswain" falleció
Byron le dedico un pequeño
monumento en su jardín en el que se
podía leer el siguiente epitafio:
Aquí reposan
los restos de una criatura
que fue bella sin vanidad
fuerte sin insolencia,
valiente sin ferocidad
que tuvo todas las virtudes del
hombre
y ninguno de sus defectos.
En la fotografía se puede ver una
escultura de Lord Byron y su perro
Boatswain en la londinense Park
Lane. La obra fue esculpida por
Richard Claude Belt y fue erigida por
suscripción pública en 1881. El
pedestal de mármol rosa fue un
regalo del gobierno griego en
agradecimiento de la participación de
Byron en su revolución, en el
transcurso de la cual perdió la vida

CARTA DE UNA DESCONOCIDA. STEFAN ZWEIG

STEFAN ZWEIG (1881-1942) - Austria
CARTA DE UNA DESCONOCIDA -1922- (Fragmento)

“Sólo quiero hablar contigo, decírtelo
todo por primera vez. Tendrías que
conocer toda mi vida, que siempre
fue la tuya aunque nunca lo supiste.
Pero sólo tú conocerás mi secreto,
cuando esté muerta y ya no tengas
que darme una respuesta; cuando
esto que ahora me sacude con
escalofríos sea de verdad el final. En
el caso de que siguiera viviendo,
rompería esta carta y continuaría en
silencio, igual que siempre. Si
sostienes esta carta en tus manos,
sabrás que una muerta te está
explicando aquí su vida, una vida que
fue siempre la tuya desde la primera
hasta la última hora.”
Stefan Zweig (Austria, 1881 – Brasil,
1942) fue de los primeros en utilizar
sus novelas como protesta ante la
intervención de Alemania en la
Segunda Guerra Mundial. Se vio
obligado a exiliarse (era judío) y
quizá su visión pesimista ante la
guerra le llevó, junto a su exposa, al
suicidio.
Además de novelas (unas dieciocho)
escribió relatos, poemas, teatro y
biografías.
Si nos centramos en sus novelas me
gustaría recomendaros “Novela de
Ajedrez” y “Carta de una
desconocida”, ambas de extensión
corta.
Autor de lenguaje sencillo y accesible,
su narrativa se basa en la
introspección psicológica de los
personajes.

La novela cuenta con una maravillosa
adaptación cinematográfica dirigida
por Max Ophüls y protagonizada por
Joan Fontaine y Louis Jourdan, y de la
que el crítico cinematográfico
Fernando Morales comentaba: "Sin
duda, uno de los dramas más
intensos y apasionados que ha dado
la historia del séptimo arte.
Maravillosa historia de amores
olvidados"