La principal fuente de conocimiento 
 que tenemos de esta mitología son las 
 Eddas, textos mitológicos, religiosos, 
 heróicos y poéticos que datan en el 
 Codex Regius que los conserva del 
 siglo XIII. Por lo visto estos poemas 
 eran aprendidos de memoria por los 
 poetas antes de que existiera el 
 lenguaje escrito. Eran utilizados en 
 ceremonias iniciáticas de la pubertad 
 a la edad adulta, en las que el neófito 
 debía identificarse con la figura del 
 dios protagonista (a menudo Odín), y 
 pasar por las pruebas que el dios 
 había establecido y superado. 
 El poema más famoso de las eddas tal 
 vez sea el Voluspá, o Profecía de la 
 Vidente, en la cual se narra el 
 interrogatorio de Odín a una bruja 
 muerta a la que resucita para que le 
 cuente el destino de los dioses (el 
 Ragnarok). La vidente comienza 
 contando la creación del mundo... 
 El Poderoso Odin, padre de todos, el 
 más importante de los dioses 
 Nórdicos. ¡Oid! pido a todas las 
 estirpes divinas, 
 grandes y pequeños hijos de 
 Heimdall; 
 me pides, oh Valfödr, que te refiera 
 las más viejas historias que puedo 
 recordar. 
 Recuerdo a los trolls, los primeros 
 nacidos, 
 que en un tiempo lejano me dieron la 
 vida; 
 nueve mundos recuerdo y nueve 
 ramas, 
 y el gran árbol del mundo aún bajo 
 tierra. 
 Fue en los tiempos primeros cuando 
 Ymir vivió; 
 no había arena ni mar, ni las frías olas, 
 tierra no había, ni el alto cielo, 
 sólo el vacío abismo, tampoco había 
 hierba. 
 Mas los hijos de Bur formaron la 
 tierra, 
 aquellos que crearon el famoso 
 Midgard; 
 brilló el sol desde el sur sobre el 
 palacio, 
 y surgió en la tierra la verde hierba... 
 El Origen del Mundo 
 En un principio era Musspell, el reino 
 de fuego, luminoso y caliente. Allí vive 
 Surtur, (el fuego) que saldrá en el fin 
 del mundo con su espada llameante a 
 acabar con los dioses. Al norte de 
 Musspell estaba Niflhei, el reino del 
 hielo eterno. De la fuente de 
 Hvergelmir se alejaban 12 ríos 
 helados, y cuando el río Eliagavar se 
 alejó lo suficiente, comenzó a 
 derretirse debido al efecto del calor 
 de Musspell. El hielo se fundió y de él 
 surgió Ymir, el padre de la estirpe de 
 los Gigantes de Hielo. Ymir se durmió 
 y sudó, de su mano izquierda surgió 
 una pareja de gigantes, y de sus pies 
 un hijo. 
 De la escarcha de Eliagavar también 
 surgió una vaca, Audumla, de cuyos 
 cuatro ríos de leche se alimentó Ymir. 
 La vaca se alimentaba chupando el 
 hielo sagrado, y en tres días sus 
 lamidas descubrieron un hombre: 
 Bruni, que era hermoso, grande y 
 poderoso, cuyo hijo Borr se casó con 
 la giganta Bestla, hija de Bolthorhn, 
 quien tuvo de el a Odín, Vili y Ve. 
 Los hijos de Borr mataron a Ymir, y en 
 la sangre de sus heridas se ahogaron 
 todos los gigantes menos la familia de 
 Bergelmi. Odín y sus hermanos 
 llevaron el cuerpo de Ymir al centro 
 de Ginnngagap, donde lo 
 despedazaron para formar el 
 universo: De su carne se hizo la tierra, 
 de la sangre el mar y los lagos, de sus 
 huesos las montañas, de sus muelas 
 las rocas, de su cerebro las nubes, y 
 de su cráneo la esfera celeste. Debajo 
 pusieron a cuatro enanos para 
 sostenerla: Nordi, Sudri, Austri y Vestri 
 (los cuatro puntos cardinales). De las 
 chispas que salían del Musspell 
 formaron las estrellas, ordenando sus 
 órbitas. La Tierra quedó rodeada del 
 Mar exterior. En sus costas viven los 
 gigantes. En su interior, protegida por 
 una muralla que son las cejas de Ymir, 
 levantaron Midgard, la Tierra Media, 
 hogar de los Hombres. 
 Paseaban los hijos de Borr por la 
 costa y encontraron dos árboles; uno 
 les dio vida, otro sabiduría y 
 movimiento, el tercero forma, habla, 
 oído y vista. Les dieron ropas y 
 nombres a los hombres que habían 
 creado: el hombre se llamó Ask y la 
 mujer Embla, de quienes descienden 
 los hombres de Midgard. 
 El gigante Narfi vivía en Jötunheim 
 (Jötum es la palabra nórdica para 
 gigante, cada uno de los nombres de 
 dioses y demás seres tiene un 
 significado en su lengua). Fue el 
 padre de Nott (la Noche), negra y 
 oscura como su estirpe. De Naglfari 
 tuvo a Aud. De Annar a Jord, la Tierra. 
 De Delling (Brillante), de la estirpe de 
 los Ases (Dioses) tuvo a Dag (el Día), 
 luminoso y bello como su padre. 
 Odín, Padre de todos, les dio caballos 
 y carros para que recorrieran el cielo. 
 El de Nott se llama Hrumfaxi y 
 humedece la tierra con la espuma del 
 bocado (el rocío). El de Dag se llama 
 Skinfaxi, e ilumina el aire y la tierra 
 con sus crines. 
 Un hombre llamado Mundilfaeri tuvo 
 dos bellos hijos Luna (el chico) y Sol 
 (su hermana). Ésta casó con un 
 hombre llamado Glen. Los dioses 
 irritados los pusieron en el cielo como 
 conductores de los carros del sol y de 
 la luna, chispas de Musspell. Los 
 caballos de Sol se llaman Arvaki y 
 Alsvidr y son refrescados por las 
 fuelles isarnkol. Luna tomó de la tierra 
 dos niños, Bil y Hjuki, que salieron de 
 la fuente Myrgir llevando la cuba 
 Saerg y la pértiga Simul. Vidfinn se 
 llama su padre. Estos niños se ven 
 aún desde la tierra. Los carros 
 celestes son perseguidos por los 
 lobos Skoll y Hati. son hijos de 
 Hródvitin y de Gyg la giganta, de cuya 
 estirpe de hechiceras, las Jarnvidur, 
 nacerá Managram, el lobo que se 
 tragará la luna. 
 Midgard, la tierra de los mortales, y el 
 divino Asgard estaban unidos 
 mediante Bifröst, el puente del arco 
 iris que estaba hecho de fuego para 
 que los gigantes no pudieran 
 atravesarlo. 
 Odín construyó el Gladsheim en 
 Idavellir, el palacio de oro donde 
 reside su trono y que es hogar de los 
 dioses desde donde los doce ases 
 dictan el destino de los hombres. 
 Vingolf sería el palacio de las diosas. 
 Dieron los dioses forma humana y 
 raciocinio a los enanos, que habían 
 nacido en la tierra como los gusanos 
 en la carne de Ymir. 
 Junto al fresno Yggdrasil tienen los 
 dioses su tribunal. Este es el mayor de 
 todos los árboles, sus ramas se 
 extienden por todos los mundos y 
 llegan al cielo. De las tres raíces del 
 árbol, una llega donde los ases, otra 
 donde los Gigantes de Hielo, allí en el 
 antiguo Ginnungagap, y la otra en 
 Niflheim. Bajo esta raíz está la fuente 
 Hvergelmir, allí Nidhogg la serpiente 
 mordisquea las raíces. Bajo la raíz que 
 va a donde los Gigantes está la fuente 
 de Mimir, que oculta la sabiduría y el 
 conocimiento. Mimir bebe de esta 
 fuente con el cuerno Gjallarhorn, y de 
 ella dio a beber a Odín, quien dio en 
 prenda su ojo siendo desde entonces 
 el dios tuerto. La tercera raíz está en 
 el cielo, y bajo ella está la sagrada 
 fuente de Urd. Allí está el tribunal de 
 los dioses, y cada día cabalgan los 
 dioses cruzando el Bifröst. En una 
 hermosa sala viven tres doncellas, las 
 Nornas, Urd, Verdandi y Skuld 
 (pasado, presente y futuro), que 
 modelan el destino de los hombres. 
 Hay nornas de los elfos, de los 
 hombres y de los enanos. 
 Un águila sabia se sienta sobre las 
 ramas del fresno, y sobre sus ojos hay 
 un halcón que se llama Vedrfolnir. La 
 ardilla Ratatosk sube y baja el fresno y 
 lleva habladurías entre la serpiente/ 
 dragón Nidhögg y el águila. Cuatro 
 ciervos comen junto al fresno: Dain, 
 Dvalin, Duneyr y Durathror. 
 Hvergelmir está llena de serpientes, y 
 en la fuente de Urd, con la que las 
 nornas refrescan sus raíces para que 
 no se pudran y cuya agua vuelve a 
 todo lo que toca transparente como la 
 clara del huevo, nadan dos cisnes. Del 
 rocío de Yggdrasil se alimentan las 
 abejas. 
 El concepto del árbol cósmico, el eje 
 del mundo, se halla por doquier en 
 las mitologías, y en este caso de la 
 nórdica se expresa con especial 
 fuerza, procedente de los indómitos 
 bosques del norte de Europa y de 
 toda la cultura celta/nórdica 
 desarrollada alrededor de la sabiduría 
 del árbol y su simbología para 
 chamanes y druidas. 
 Otros reinos que el árbol comunica 
 son Alfheim, hogar de los Elfos de la 
 Luz (brillantes y hermosos) y los de 
 las Tinieblas (más negros que la pez; 
 que viven bajo tierra). 
 El viento es creado por un gigante en 
 forma de águila que vive al norte del 
 mundo, Hraesvelg, que lo crea al 
 aletear. Svasud (agradable) es el 
 padre del verano y Vindlom o 
 Vindsvalr hijo de Vasar, el invierno, de 
 fiero corazón. 
 Los Dioses 
 Los dioses nórdicos aparecen 
 divididos en dos familias o categorías: 
 los Ases (habitantes de Asgard) y los 
 Vanes (que viven en Vanaheim). 
 Parece ser que existió una antigua 
 disputa entre los dos clanes, que 
 acabaron firmando la paz. Los Vanes 
 eran una suerte de semidioses, se 
 ocupaban de asuntos terrenales como 
 las riquezas, el comercio, la fertilidad, 
 etc... 
 Odín es el más noble y antiguo, y 
 todos le sirven. Frigga, su esposa, 
 conoce el destino de los hombres 
 aunque no sea vidente. Odín es 
 llamado Allfödr (Padre de todos), 
 Valfödr (Padre de los caídos en la 
 lucha, a quienes aguarda el Valhalla), 
 Hangagud (dios de los ahorcados) y 
 muchos otros nombres. 
 Thor es el más fuerte de hombres y 
 dioses.  
  
 Fuente: www.portal.bibliotecasvirtuales.com
