Kiribati, un pequeño estado situado 
 en el océano Pacífico, está haciendo 
 planes muy serios, que ha 
 presentado a la Comunidad 
 Internacional y a la prensa, para 
 trasladar toda la población, unas 
 113.000 personas, de las islas que la 
 conforman a Fiyi. 
 Su presidente, Anote Tong, ha 
 declarado que es el último recurso, 
 pero que no les quedan alternativas: 
 las mareas llegan ya a sus aldeas. 
 Su intención es comprar 5000 
 hectáreas de suelo en Vanau Levu, 
 la segunda isla en tamaño de Fiyi e 
 instalarse allí. En una primera oleada 
 desplazaría a sus trabajadores más 
 cualificados. 
 Esta nación está compuesta por 32 
 atolones de coral y una isla que 
 ocupan unos 800 kilómetros 
 cuadrados. Tres de los atolones 
 desaparecieron bajo el océano en 
 1999. 
 Las tierras agrícolas cada día 
 merman en tamaño por que las 
 engulle el mar o porque los niveles 
 de salinización son demasiado 
 elevados para cultivar nada. 
 La mayor parte de la población vive 
 actualmente hacinada en Tarawa, 
 centro administrativo del estado. 
 Ahora el problema es cómo financiar 
 y dar un nuevo hogar a 113.000 
 personas en Fiyi, para lo que 
 solicitan ayuda internacional. 
 Via: telegraph.co.uk

